Florencia/WWF
La tala y el tráfico ilegal de madera hacen parte de las principales amenazas que ciernen sobre la Amazonia. Cada año, alrededor de 324.217 hectáreas son taladas en esta región, donde también se estima que, en el mismo periodo, aproximadamente 1,3 millones de metros cúbicos de este material se extraen de manera ilegal. Reducir este flagelo es uno de los desafíos más apremiantes que tienen las Corporaciones Autónomas Regionales.
Gracias al pacto firmado el pasado 15 de septiembre en la ciudad de Florencia, Caquetá, el trabajo en torno a la gobernanza y desarrollo forestal de la Amazonia será articulado. El compromiso de trabajo conjunto fue firmado por Cesar Rey, director de Bosques y Biodiversidad del Ministerio Ambiente y Desarrollo Sostenible, así como por directores de Corpoamazonia, CDA –Corporación para el Desarrollo Sostenible del Norte y el Oriente Amazónico–, Visión Amazonia, representantes de organismos no gubernamentales, WWF y representantes de las mesas forestales de la región.
Además de la reducción de la deforestación, el llamado Acuerdo por la Legalidad de los Bosques de la Amazonia Colombiana tiene por objeto asegurar que los productos maderables, no maderables y servicios ecosistémicos sean una alternativa productiva para la comunidad, que fomenten la legalidad y que permitan aunar esfuerzos para el control del tráfico ilegal.
El encuentro, liderado por Visión Amazonía, permitió la socialización e intercambio de experiencias y saberes de las Mesas Forestales de los departamentos del Caquetá, Guaviare, Putumayo y Amazonas. Además, en el evento se aprovechó para hacer el acto protocolario de la firma de los acuerdos departamentales por la madera legal de Caquetá y Putumayo y Amazonas. En este último participaron empresas, asociaciones e instituciones, por parte de los sectores madereros.
Los esfuerzos que se están realizando a nivel departamental y regional apuntan a coordinar y fortalecer la Gobernanza Forestal en los departamentos de la Amazonia colombiana. Asimismo, se pretende acompañar esos procesos con estrategias de desarrollo forestal sostenible, mediante el uso de Tecnologías para el aprovechamiento y transformación, apertura de mercados e implementación de normatividad forestal regional.