diariodelsur.com.co
Los habitantes de Mocoa manifestaron que solo después de la contienda electoral pudieron descansar del ruido generado por los megáfonos que invitaban a votar. Pidieron a las autoridades de esta localidad tomar cartas en el asunto en las próximas elecciones presidenciales.
“Por fin se acabó la bulla. Estábamos desesperados, ya no sabíamos qué hacer con ese ruido que comenzaba a las 7:00 de la mañana y terminaba a las 11:00 de la noche”, dijo Floralba Chindoy, vecina de esta localidad.
Numerosas personas que trabajan de manera independiente en el centro de la ciudad dijeron que el ruido de los carros que hacían peritoneos los tenía al borde de la desesperación.
Chindoy dijo, además, que para salir a la calle había que prepararse psicológicamente. “En varias ocasiones tuve que salir a llamar a mi hija que se encuentra en Bogotá y en ninguna de las oportunidades pude hablar con ella por el ruido de los seguidores de los políticos”.
“A veces me iba para otro punto de venta de minutos, para lograr comunicarme con mi hija, pero todo fue inútil. El ruido estaba en todos lados”, dijo la desesperada mujer.
Lo cierto es que en el comienzo de esta semana la llamada contaminación auditiva ha desaparecido con el paso de la fiesta electoral del domingo.
La comunidad indicó que espera que para las campañas presidenciales las autoridades tomen cartas en el asunto y controlen el fenómeno.