Intentando aproximarnos al lenguaje cotidiano vamos a realizar unas comparaciones que nos van a permitir conocer de mejor manera la riqueza cultural de nuestro Putumayo. Así por ejemplo, cuando decimos que tenemos un patrimonio nos estamos refiriendo al hecho de poseer algunas cosas ya sea porque las hemos conseguido o porque nos fueron heredadas. En las sociedades, en las comunidades, sucede exactamente lo mismo, con la diferencia que aquí se trata de bienes o activos colectivos y en alguna manera son propiedad de todos. Cuando esos activos se refieren a comportamientos, conocimientos, elementos de usos y costumbres relevantes de una colectividad, entonces decimos que ese inventario constituye el Patrimonio Cultural de una comunidad.
Con los conceptos ya claros, la invitación es iniciar a conocer esos activos culturales que hacen de nuestro Putumayo un territorio sin igual, único. Para ello hemos dispuesto una página web , www.patrimonioculturalputumayo.co, que semanalmente nos irá mostrando esos aspectos de las subregiones que caracterizan nuestro departamento. No por alejado de la capital, podríamos desconocer la riqueza cultural de Puerto Leguízamo, a manera de ejemplo, que con sus grupos étnicos nos alimentan con sus artesanías, su gastronomía, su mitología, su lengua, en fin con todos aquellos elementos que son un legado valioso a través del tiempo y que se debe luchar para conservarlos, conocerlos, defenderlos y en algunos casos recuperarlos. Si geográficamente nos ubicamos en el punto opuesto podemos decir lo mismo de los pueblos ancestrales del Valle de Sibundoy. No podemos dejar por fuera la cultura de los pueblos siona y cofán del bajo Putumayo, el pueblo coreguaje en nuestros límites con los vecinos del Caquetá y de todos aquellos pueblos indígenas que posteriormente fueron llegando y en su maleta de llegada nos han traído también sus valiosas culturas. Definitivamente somos un pueblo multicultural.
Es preciso recordar que el Putumayo ha sido considerado como tierra de colonización y en su inmigración los colonos han llegado con sus costumbres que también constituyen aportes culturales y se precisa no olvidar que los hijos de aquellos colonos han venido, en procura de construir identidad, realizando procesos que van tomando visos de patrimonio cultural de los respectivos pueblos. Vemos con beneplácito cómo se organiza festividades que son factor de integración de los pueblos fronterizos con Ecuador, de qué manera la gente rinde homenaje a sus ríos, por mencionar algunos procesos.
Pero sería injusto dejar por fuera de estos conceptos a la Iglesia Católica que se encargó por una centuria de la evangelización de este territorio, y en esa tarea le hizo aportes valiosos a la cultura que hoy se ven traducidos en hermosos templos, valiosas pinturas e íconos religiosos inconmensurables.
Todo esto lo pondremos gradualmente a disposición de nuestra gente del Putumayo por la internet, esperando que conozcamos y reflexionemos acerca de la riqueza que tenemos a nuestro lado, ya que sucede con frecuencia que no nos detenemos a admirarla, precisamente porque la tenemos tan cerca de nosotros. La invitación es a que nos detengamos un momento, el suficiente para valorar y admirar nuestro patrimonio cultural.