Por : Germán Ortiz Ch.
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En el año de 1953 al gobierno nacional de Colombia se le ocurrió borrar del mapa geográfico y político al territorio putumayense. La Comisaría se convertía en parte del departamento de Nariño, pero gracias a la tenacidad de un grupo de habitantes de este lugar, cuatro años después, a través del Decreto 131 de 1957, se logró recuperar esa dignidad, se proclamó lo que hoy llamamos “La Desanexión”, y volvimos a convertirnos en un cuerpo jurídico estatal autónomo, independiente del vecino departamento.
Desde hace varios años vengo hablando de que los putumayenses nos merecemos celebrar un día patrio, un día en el que expresemos de diferentes maneras, que nos sentimos orgullosos de ser putumayenses, hayamos o no hayamos nacido en este hermoso territorio. Una fecha en la que icemos la bandera del departamento, hagamos desfiles con las bandas de paz de las Instituciones Educativas, realicemos actos culturales en colegios, escuelas, parques, o por qué no, conciertos con nuestros propios artistas en honor al Putumayo. Pues para muchos de mis interlocutores en esta iniciativa, ese día de celebración debería ser éste: el 17 de julio.
Hoy hacemos homenaje a esos valerosos hombres y mujeres que no se sometieron al yugo, que no quedaron conformes con ser sólo un apéndice de otro territorio y se empeñaron en recuperar nuestra independencia. A ellos, muchas gracias.
De la fecha queda un barrio en el centro de Mocoa, pero también la iniciativa de hacer de un día como hoy, una jornada muy especial para nuestro amado departamento del Putumayo.
Hoy se cumplen 67 años de la desanexión de Putumayo a Nariño.