Por: *J. Alexander Africano M.
El pasado 24 de julio de 2023 el Juzgado Segundo Civil municipal de Mocoa le diò la razón la señora Ana Milena Moreno ex gerente del hospital Alcides Jimenez de Puerto Caicedo, quien interpuso una acciòn de tutela en contra de la GOBERNACION DE PUTUMAYO tras considerar transgredidos los derechos al trabajo, la igualdad de la mujer y el debido proceso administrativo.
Los hechos se remontan al pasado 05 de julio cuando tal como se conoció en redes sociales la entonces gerente Ana Milena fue removida de su cargo con la justificación de haber presentado una renuncia irrevocable al mismo. Trascendió que la entonces gerente no había presentado ninguna renuncia, lo que podría tratarse de un caso de suplantación, el cual a primera vista no fue objeto de verificación por parte de la gobernación sino que fue dado por hecho.
La respuesta no se hizo esperar y desde el mismo momento de la remoción de cargo la afectada pronunció una frase que se volvió popular en el departamento. «yo no renuncié, me renunciaron», frase que volvió a sonar el 26 de julio en el recinto de la Asamblea Departamental en momentos en que el diputado Wilder Castañeda citò a un debate de control político a la secretaria de salud departamental y donde fueron mas los interrogantes que las respuestas al debate.
Por ahora, la Autoridad Judicial ha dejado sin efectos de manera transitoria el decreto 0255 del 05 de julio de 2023 mediante el cual se aceptó la supuesta renuncia de la señora MORA, hasta tanto se defina el asunto en la jurisdicción de lo contencioso administrativo de manera definitiva.
Es de señalar que el término de nombramiento de la gerente del hospital es hasta el 31 de marzo de 2024. De momento se ha ordenado al Gobernador de Putumayo BUANERGES ROSER PEÑA para que en el tèrmino de 48 horas a la notificación, se expida el respectivo acto administrativo que REINTEGRE AL CARGO de gerente de la ESE Hospital Alcides Jiménez del municipio de Puerto Caicedo.
Es probable que el fallo sea impugnado por la gobernación, ante lo cual se debe remitir el expediente a la honorable Corte Constitucional para su eventual revisión; por hora la gerente espera con paciencia su retorno al cargo y ha recibido el respaldo de un centenar de Mujeres en el departamento de Putumayo quienes coinciden en afirmar al igual que otros sectores que se trata de una persecución política y que simultáneamente es un claro acto de violencia contra la mujer, dadas las consecuencias psicológicas, sociales y morales que la decisión de la entidad causó al removerla del cargo.
Es preciso recordar que la Ley 1257 de 2008 definió como daño psicológico a una mujer como la consecuencia proveniente de la acción u omisión destinada a degradar o controlar las acciones, comportamientos, creencias y decisiones de otras personas, por medio de intimidación, manipulación, amenaza, directa o indirecta, humillación, aislamiento o cualquier otra conducta que implique un perjuicio en la salud psicológica, la autodeterminación o el desarrollo personal.
Y es que las entidades públicas tienen la obligación de darle cumplimiento a esa norma que tiene por objeto entre otros dictar normas de sensibilización, prevención y sanción de formas de violencia y discriminación contra las mujeres en Colombia.
En hora buena, el fallo por ahora es a favor de ANA MILENA, tal caso no ocurre con cientos de mujeres que deben vivir todo tipo de acechanzas, constreñimientos y demás tipos de violencia que a diario se vive en el sector público y que no son denunciadas por el temor a perder un empleo en cualquier entidad estatal u otras consecuencias.
“Yo no renuncié!… me renunciaron!” Ana Milena Mora
Audio Entrevista : Carlos Mauro Rosero