RadioNacional – La transformación de estos frutos amazónicos contiene un toque exquisito para los amantes del buen vino.
Por : Gelitza Jiménez
La palma de asaí es un fruto amazónico considerado como un superalimento por excelencia que solamente se da en medio de los bosques del sur de Colombia. Es redondo, de color morado y su tamaño es aproximadamente de 14 milímetros. En zona rural de Puerto Caicedo, una familia que anteriormente se dedicaba a los cultivos de hoja de coca, le apuestan a la transformación de asaí convirtiéndolo en el vino artesanal más apetecido.
Don Hernán Gómez dejó la siembra de cultivos ilícitos por el asaí, desde el 2014 pertenece al Programa Nacional Integral de Sustitución de Cultivos Ilícitos (PNIS). Desde entonces, ha recibido apoyos económicos por más de 12 millones de pesos. Actualmente, tiene mil plantas de esta palma, de las cuales, produce más de mil botellas de vino al año, con un contenido de 4 kilos del fruto por cada una y con 12% de alcohol.
“Los beneficios para la salud al tomar el vino de asaí son bastantes. Ayuda a reducir problemas de colón y el insomnio. Inicialmente, este proyecto era para el consumo familiar y núcleos cercanos, hasta que decidimos emprender con este fruto amazónico”, dijo Gómez.
Este líder del PNIS se ha destacado en varios escenarios regionales dando a conocer su línea productiva, la cual espera exportar al centro del país.
Vino de chontaduro
Los emprendedores putumayenses han sacado provecho a los frutos más representativos de la región. Una familia oriunda de Villagarzón (Putumayo) lanzó su vino de chontaduro semidulce para esta época decembrina.
Este producto artesanal también contiene altos beneficios para la salud, pues se asegura que previene el cáncer. Tatiana Delgado, líder de este proyecto de emprendimiento, unió ideas con su familia de crear el vino de chontaduro, gracias a las 17 hectáreas destinadas al cultivo de este fruto afrodisiaco.
“Las mezclas son con harina de chontaduro, agua, endulzante y el toque secreto. Se deja un proceso de conservación por cuatro meses, se mide la temperatura y el alcohol. Luego lo procesamos y obtenemos el vino de chontaduro”, indicó, Delgado.
El chontaduro no solamente se degusta en el vino, sino en varios productos como en tortas y panes, siendo un producto líder en Villagarzón.
Estos vinos artesanales, preparados con frutos emblemáticos de la región, tienen bastante demanda durante las fiestas navideñas en Putumayo, ayudando a la recuperación de la economía local y a la preservación del ecosistema.