Al menos 700 personas se ubicaron en el sector de Planadas a las afueras de Mocoa, todos afectados de la avalancha y que le exigían reubicación inmediata al Gobierno. El lote donde instalaron un improvisado campamento era de propiedad de un campesino que, según los afectados, estaba dispuesto a vender.
Pero la dinámica es diferente, dijo el alcalde José Castro, “el Gobierno avanza con la compra de predios y ahora tenemos que llegar al entendimiento, no es posible ocupar predios privados todo tiene un trámite”.
Los afectados aseguran que se van a mantener en el parque principal del municipio hasta que la alcaldía no les garantice un lugar para vivir, el problema es que no quieren llegar a los albergues pues consideran que la situación allí es bastante complicada.
“Fueron con la Policía a decir que nos van a reubicar pero no tenían soluciones concretas, solo que nos fuéramos”.
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