Quien cuando ha sido niño, no ha soñado con tener una bicicleta, y más aún aquellos niños que son hijos de una familia noble y de muy escasos recursos como la familia Madroñero Ortiz, pues este sueño se le hizo realidad a DIEGO ALEXANDER MADROÑERO ORTIZ, un niño de 4 añitos de edad.
Esta bonita historia se vivió en el Puente Metálico, un lugar donde la Policía realiza puesto de control, por este lugar era frecuente ver a Diego, pasar en una bicicleta que con mucho esfuerzo maniobrara, pues este aparato lo habían amarrado hasta con alambres y cabuyas para que este inocente tuviera su juguete anhelado.
Unidades de la seccional de Transito y Transportes de la Policía al mirar a este menor con la desalmada bicicleta, se reunieron y compraron una bicicleta nueva y le dieron la sorpresa al niño, que con sonrisas y gritos de agradecimiento dejo ver la felicidad que lo embargaba en ese instante.
Lo más importante de estas acciones de solidaridad, es poder apreciar el verdadero valor de la vida a través de una sonrisa y un abraso de verdadero agradecimiento de un niño, con este gesto ejercemos influencia benéfica entre ellos y participamos de sus alegrías.