Ing. Ferney Geovanni Lucero Cuaran Esp. Servicios Públicos Domiciliarios
Según el informe del Estado De La Vigilancia De La Calidad De Agua Para Consumo Humano En Colombia durante el periodo del 2007 – 2011, publicado el 4 de diciembre del 2012 por el Instituto Nacional de Salud, se observa que el Putumayo es unos de los dos departamentos con la peor calidad de agua de consumo distribuida en sus habitantes.
El indicador IRCA se definió como el grado de riesgo de ocurrencia de enfermedades relacionadas con el no cumplimiento de las características físicas, químicas y microbiológicas del agua para consumo humano, entre más alto el indicador (%), existe más Probabilidad en la ocurrencia de enfermedades crónicas y agudas, las cuales se podrían evitar si se mejora la calidad del agua y evitaría un desgaste de los recursos de la población y de las entidades de salud en este tipo de casos.
En el informe sobre la clasificación del nivel de riesgo en salud, solo el 18% del agua distribuida en las zonas urbanas y el 8% en las zonas rurales, se puede considerar apta para el consumo humano Dato preocupante si se tiene en cuenta que el 47% de la población se ubica en la zona urbana (155,164 habitantes) y el 53%(174,434 habitantes) en la zona rural. Es decir que el 82% del agua de consumo distribuida en las zonas urbanas y el 92% del agua en las zonas rurales del Putumayo, presentó graves deficiencias en su calidad por ser inviable sanitariamente o encontrarse en niveles de riesgo alto y medio., agua que está deteriorando entre otras causas, nuestra vida productiva y economía familiar por las enfermedades que causa en nuestros organismos y sobre todo en el de nuestra niñez.
Hay que tener en cuenta que la cobertura no se alcanza con las conexiones que se tenga de acueducto, ni con agua que no es apta para el consumo humano, que es lo que sucede en nuestro departamento, y en esto, las entidades generalmente se enfocan en comprar tubería para “ampliar cobertura” o cambiarla en determinados sectores, pero se han olvidado de fortalecer y lograr tener empresas que permitan garantizar un servicio de acueducto continuo, eficiente y de calidad, y prueba de ello son los resultados del informe en mención, en este sentido, entre varias acciones para que una empresa pueda mejorar, es realizar procedimientos que permitan ampliar su valor de recaudo por sus servicios en hasta un 30% sin que esto signifique que para ello tenga que subir la tarifa (en la mayoría de los casos), o disminuir sus costos hasta en un 20%, y ello no representa el recorte de personal, de forma tal, que puedan mejorar considerablemente en el corto plazo, los servicios que prestan.
Si se tienen empresas eficientes y auto sostenibles se vería reflejado en el bienestar para la comunidad y le permitiría al municipio realizar mayor inversión en las comunidades más necesitadas, en el momento y como están las cosas, tanto el departamento como los municipios y las empresas de servicios públicos domiciliarios de acueducto, están incumpliendo todo lo relacionado a las leyes y normas que regulan y reglamentan el servicio de acueducto, todas estas entidades se deben interesar en el tema porque es de su competencia alcanzar unas metas de agua apta para el consumo humano, según la siguiente tabla.
Esperando tener unas mejores empresas, no sería conveniente que la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios, como autoridad competente inicie las investigaciones administrativas correspondientes para imponer sanciones por incumplimiento de la normatividad vigente, salvo que nos sigan dando ese tipo de agua.
Las acciones de tipo legal, pueden llegar desde sanciones a todos los encargados y responsables de este servicio según la ley 142 de 1994 y siguientes, hasta situaciones en las cuales suspendan la prestación del servicio a las empresas que actualmente operan en cada municipio.
Este tema tiene, como popularmente se dice “mucha tela para cortar”, los invito a que consulten entre otros documentos, el informe en mención el cual se encuentra en: