Después de la reforma a la Justicia, la confianza y la favorabilidad del Congreso quedaron en el piso. Guillermo Rivera, Alfonso Prada y Germán Varón están dedicados a recuperarlas a punta de trabajo y proyectos.
Aunque son de partidos distintos, a Guillermo Rivera, Germán Varón, Alfonso Prada, los une mucho más de lo que los distancia. Por ejemplo, además de compartir curul en la Comisión Primera de la Cámara, los tres tienen claro que la crisis de la reforma a la justicia fue un punto de quiebre en la relación entre el Congreso y el gobierno, y entre el Congreso y la opinión pública. Por esto, y a pesar de que dos de ellos votaron la polémica reforma, están dedicados a demostrar que, a punta de ideas y trabajo en equipo, a pesar de los intereses e influencias que en el parlamento se mueven, un cambio en el Congreso no es imposible.
En estos meses, aunque a primera vista parezca que el Capitolio está paralizado, son varios los congresistas que trabajan en proyectos propios. Telésforo Pedraza, perteneciente al partido Conservador, sigue adelante con su iniciativa de acabar la Vicepresidencia, Armando Benedetti, de La U, presentó siete proyectos sobre eutanasia, prostitución y retén social, y otros, como el de transgufismo, siguen adelante, así sea a paso de tortuga.
Por su parte, estos tres “mosqueteros” se dieron cuenta de que les va mejor con un trabajo en llave. Por esto, presentaron varios proyectos en conjunto y tienen otros en el tintero. Ya presentaron una reforma constitucional sobre la Ley 5, en especial, para reglamentar el capítulo de las ya famosas conciliaciones. Para los representantes, los proyectos de ley trabajados durante meses no se pueden transformar al antojo de los conciliadores. Por esto, proponen que las conciliaciones deben radicarse 48 horas antes de la votación, para que los congresistas tengan tiempo para leerlas y no les quede ninguna excusa sobre su comportamiento a la hora de votar. La comisión de conciliación estará conformada por los autores y los ponentes, y lo que pase en esas sesiones deberá quedar registrado en un acta.
Otro proyecto que une a Prada, Varón y Rivera es la derogatoria del acto legislativo sobre conflicto de intereses, la cual dio pie a la crisis de la reforma a la justicia. Estos representantes creen que dicho acto cambió el comportamiento de los congresistas y en ese sentido, confían en que debe restablecerse esa precondición para votar a conciencia. La ponencia ya está radicada, pero el debate ha sido aplazado más de una vez.
El grupo de congresistas también trabaja en un proyecto sobre hábeas corpus y la creación de un tribunal nacional para luchar contra la impunidad. Además, también los trasnocha el tema de la unión civil o el matrimonio de personas del mismo sexo, por lo cual están preparando un proyecto sobre el tema.
El camino no es fácil. Los proyectos de ley son demorados y son varios los enemigos de la modernización y la transparencia del Congreso. Sin embargo, estos representantes confían en que la unión sea la fuerza, tienen buenas iniciativas, y poseen la energía y la oratoria para defenderlas.
¿Quiénes son?
Alfonso Prada es representante a la Cámara por el Partido Verde. Tiene una larga trayectoria política, pues hizo parte de las juventudes galanistas, fue concejal de Bogotá, hizo parte de la Ola Verde, apoyó la candidatura presidencial de Antanas Mockus y es muy cercano a Enrique Peñalosa. En el 2010 llegó a la Cámara y se ha hecho camino a través de debates y ponencias. Es abogado y profesor constitucionalista.
Germán Varón es representante de Cambio Radical. Ha sido secretario de Corabastos, personero de Bogotá, y congresista desde el 2002. Germán Vargas lo convenció de ser su fórmula y hasta hoy es uno de los escuderos más cercanos al ministro de Vivienda. En el 2008 fue presidente de la Cámara en medio de los debates de la reelección del expresidente Álvaro Uribe. Es abogado y especialista en Derecho Administrativo de la Universidad del Rosario. Hasta hace poco, fue el presidente del partido Cambio Radical y le tocó liderar el duro proceso de entregar avales para las elecciones locales, por lo cual no tiene la mejor relación con la bancada de su partido, en especial con los senadores.
Guillermo Rivera es representante de Putumayo por el Partido Liberal. Es abogado del Externado y tiene varios posgrados en el Instituto de Estudios Políticos de Paris. Desde el 2002 ocupa una curul en la Cámara de Representantes y es uno de los líderes del suroccidente del país. Gracias a su dedicación y trabajo, junto con Juan Fernando Cristo en el Senado, la Ley de Víctimas es una realidad. Su trabajo hoy en día sigue focalizado hacia las víctimas, el seguimiento a la Ley y el mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes de Putumayo.