Fuente : RadioMacondo
El lunes 30 de septiembre en horas de la mañana, se conoció que estructuras herederas del paramilitarismo que controlan el centro urbano de Puerto Asís y zonas rurales aledañas, desde hace cinco semanas se están movilizando aguas abajo del río Putumayo para disputar el control territorial al Frente Carolina Ramírez de FARC-EP.
Los armados manifestaron a comunidades donde ingresaron que cuentan con la colaboración de sectores militares y políticos y que harán respetar el control territorial que vienen ejerciendo sobre la ribera del río Putumayo y sus afluentes, en el corredor Puerto Vega-Teteyé, la Zona de Reserva Campesina Perla Amazónica, Inspección de Puerto Asís y Piñuña Blanco.
De acuerdo con relatos de pobladores el movimiento de esta estructura armada se realiza en medio de la presencia militar de la Brigada XXVII de Selva y unidades de la Fuerza Naval del Sur de la armada.
El pasado 26 de septiembre, la Defensoría del Pueblo, emitió la Alerta Temprana No. 040-19, donde recuenta la situación de riesgo por la presencia y disputa de facciones ilegales disidentes, exponiendo a los habitantes del corregimiento de Piñuña Blanco a una crítica situación humanitaria, debido al confinamiento, al desplazamiento de familias y personas, hasta el momento en un número indeterminado, amenazas e infracción al principio de distinción DIH.
La Alerta de la Defensoría del Pueblo reitera el agravamiento de la crisis humanitaria y de derechos humanos derivadas del incumplimiento del Acuerdo de Paz, de las nuevas dinámicas de violencia y su interacción con nuevas criminalidades y las heredadas del paramilitarismo, así como, la lamentable coincidencia en medio de estas dinámicas de las operaciones empresariales multinacionales.
Situaciones, todas, en medio de un Estado colombiano que continúa sin prevenir y proteger la vida e integridad de la población campesina, indígena y afrodescendiente de Puerto Asís y sus derechos territoriales.
Bogotá D.C., 1 de octubre de 2019
Comisión Intereclesial de Justicia y Paz.
Imagen: Pablo de Narváez/WWF/Semana Rural.