Por: Claudio Gomajoa.
En la casa del adulto mayor Divino Niño, del municipio de Orito, los adultos mayores son abandonados por parte de sus familiares
Convirtiéndola la ancianidad en una condición vergonzante para el individuo que la vive y muchos familiares que sienten vergüenza de sus padres al llegar a esa edad, siendo esta una de las causas del abandono que ellos sufren, por ello atraviesan una serie de dificultades, por muchas razones, porque sus mismos familiares y la sociedad los ha aislado.
el adulto mayor no tiene cabida laboral e incluso muchos de los que pudiéramos llamar hombres maduros laboralmente activos, son también considerados como viejos para laborar; unido todo esto a la concepción que se tiene del abuelo como carga para sus familiares cuando este no puede responder con la misma agilidad de años anteriores, quedando como único recurso el apartarlo del círculo familiar, de tal modo que en muchos casos terminan internados en institutos que atienden a esta población, mas sin embargo el sentimiento de abandono e impotencia, aumentando el sentimiento de nuestros abuelos.
Aunque existan leyes e instituciones que se preocupan por atender de la mejor forma posible al adulto mayor, es necesario concientizar y educar a nuestra población para que entienda que el abuelo es una persona digna y capaz de aportar a un a su sociedad, por lo que ellos buscan es el afecto y el reconocimiento por arte de los suyos sin tener en cuenta sus debilidades físicas o mentales. Ante lo cual es bueno ahora recordar la frase de Víctor Hugo “si se ve fuego en los ojos de los jóvenes, en el ojo del viejo se ve luz”.