Revista Poder –
Gobernador del Putumayo y Alcalde de Mocoa con los mas bajos porcentajes de favorabilidad.
Es frecuente la publicación de lo que la gente piensa de sus gobernantes en las cuatro principales ciudades y en los departamentos más influyentes del país. Sobre la gestión de los demás, poco o nada se conoce.
La revista PODER ha contratado con el Centro Nacional de Consultoría un trabajo para medir el desempeño de los 32 alcaldes de las capitales y de igual número de gobernadores, sin hacer distingos de jerarquía e influencia.
Los resultados que se publican en esta edición muestran muchas cosas interesantes, más allá de que el Gobernador de Antioquia y el Alcalde de Barranquilla son los mejor calificados. Se evidencia, por ejemplo, que los alcaldes de la costa Caribe están haciendo bien su trabajo, en tanto que en las zonas periféricas de los territorios nacionales, a donde llegan los recursos de las regalías, su aceptación es muy baja.
Un total de 12 de los 32 alcaldes reciben una calificación por encima del 50%; 17 están entre 30% y 50%, que indica que su imagen no es favorable, pero puede mejorar, y 3 –Pasto, Mocoa y Tunja– decepcionan con una muy baja nota.
En cuanto a los gobernadores, 17 están por encima del 50%; 12, entre el 30% y 50% y 2, muy mal, Casanare y Putumayo, regiones donde se supone no hay problemas financieros por efecto de los recursos que les llegan del centro. El gobernador del Valle no se calificó, pues su titular fue destituido por la Procuraduría.
Hay casos muy destacados. La gestión del gobernador de Risaralda y del alcalde de Pereira registra una alta popularidad, mientras que en Pasto y Tunja es muy negativa. Entre los gobernadores, Santander y Norte de Santander son bien calificados, en tanto que Cauca y Meta muestran bajo respaldo.
Los alcaldes y gobernadores iniciaron su gestión en enero de 2008 y terminan su período en diciembre de 2011, por lo que a la fecha les queda 16 meses. En el primer semestre del 2011, se hará una nueva evaluación y otra en octubre, a pocos meses de terminar.
PUTUMAYO
Es el burgomaestre regional con la peor calificación en la encuesta y es uno de los que más problemas afronta, no solo por que la mayoría de entidades del departamento están intervenidas, sino por las denuncias sobre corrupción en su Administración.
Guzmán ha sido destituido en dos oportunidades. La segunda fue por la firma irregular de dos contratos. En esa oportunidad, la Procuraduría lo inhabilitó para ejercer cargos públicos durante 12 años, pero apeló y volvió a la Gobernación. Un grupo de ciudadanos está pidiendo la revocatoria de su mandato por la crisis en que tiene sumido al departamento, que ha visto desfilar a seis gobernadores en los últimos cinco años.
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MOCOA
Es uno de los alcaldes con la menor percepción favorable de su gestión, debido a las consecuencias dejadas por el derrumbe de las pirámides, un fenómeno que se extendió en todo el departamento del Putumayo y que originó graves disturbios en Mocoa, así como la parálisis en el comercio y el transporte.
Esta ciudad todavía no ha logrado recuperarse de la difícil situación que vivió hace cerca de dos años y de la que responsabilizaron a las autoridades por no actuar a tiempo para contener la expansión de DMG, que se quedó con los ahorros de miles de personas.
Los habitantes atribuyen el atraso de la ciudad a la poca gestión de Narváez, hecho que se ha traducido en que la capital del Putumayo presente graves problemas: no tiene agua potable y sus vías de comunicación están en mal estado.
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