Cerca a la temporada de vacaciones de fin de año, Parques Nacionales emitió un comunicado en el que reiteró que en 10 de los 11 Parques Nacionales ubicados en la Amazonía no se puede realizar ecoturismo.
El único Parque en el que se puede hacer esta actividad es en Amacayacu, pues hace parte de su estrategia de conservación.
En los otros 10 Parques solo se pueden realizar actividades de conservación, educación e investigación, puesto que “albergan ecosistemas únicos y cruciales para la vida, que son frágiles y se deben proteger a toda costa”, dice Parques Nacionales.
Parques prohibidos para hacer ecoturismo en la Amazonía.
- Parque Nacional Natural Yaigojé Apaporis.
- Parque Nacional Natural Serranía de los Churumbelos.
- Parque Nacional Natural Río Puré.
- Reserva Nacional Natural Puinawai.
- Reserva Nacional Natural Nukak.
- Parque Nacional Natural La Paya.
- Parque Nacional Natural Cahuinarí.
- Parque Nacional Natural Alto Fragua Indi Wasi.
- Santuario de Flora Plantas Medicinales Orito Ingi – Ande.
- Parque Nacional Natural Serranía de Chiribiquete.
¿Qué daños genera hacer ecoturismo en los 10 parques? La entidad afirmó que transitar fuera de senderos establecidos compacta el suelo, destruye las plantas nativas y genera amenazas a especies, que cuando solo habitan en ese lugar o están en peligro de extinción, puede generar efectos irreversibles.
El ecoturismo también pone en riesgo a comunidades indígenas al contaminar con desechos, como botellas plásticas, las fuentes hídricas de las que ellos dependen para su uso doméstico.
Puede afectar negativamente también las estructuras tradicionales de los indígenas, ya que estar en constante contacto puede alterar sus prácticas tradicionales, cosmovisión y organización social.
Hay turismo no autorizado. Según Parques Nacionales, a pesar de las prohibiciones, pobladores, autoridades locales e influencers ofrecen paquetes turísticos dentro de áreas protegidas o acceso a territorios indígenas sin el consentimiento de las comunidades.
“En el Parque Nacional Natural Yaigojé Apaporis, las visitas a sitios sagrados han desencadenado conflictos sociales entre comunidades indígenas, además de afectar directamente su espiritualidad”, anotó la entidad.
De igual manera, los sobrevuelos ilegales en Chiribiquete ponen en riesgo a las comunidades indígenas en aislamiento voluntario.
Puede poner en riesgo a los turistas. La entidad advirtió que en zonas de alta fragilidad ambiental, como el Río Puré, no hay infraestructura de rescate ni atención médica, por lo que en caso de accidentes, ataques de animales silvestres o enfermedades tropicales, Parques Nacionales no podrá responder.