ElEspectador – Información institucional | El Programa Rutas PDET, desarrolló una apuesta integral para el fortalecimiento de las cadenas productivas de cacao y lácteos en nueve municipios PDET (Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial) de Caquetá, Putumayo y Nariño. Entre los logros más destacados se encuentran la construcción de 372 kilómetros de vías rurales, conectando a más de 2 mil habitantes con mercados, servicios de salud y educación.
En el marco de los eventos de cierre del Programa Rutas PDET del Fondo Europeo para la Paz, celebrados en Caquetá, Putumayo y Nariño, cerramos un capítulo de transformación que dejó huella en las comunidades rurales de estas regiones. Durante cuatro años, trabajamos para generar oportunidades que contribuyan con la construcción de paz de estos territorios. Los eventos de cierre fueron una oportunidad para reconocer los logros alcanzados gracias al esfuerzo colectivo de las mujeres y las organizaciones participantes del Programa.
El Programa Rutas PDET, desarrolló una apuesta integral para el fortalecimiento de las cadenas productivas de cacao y lácteos en nueve municipios PDET (Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial) de Caquetá, Putumayo y Nariño. Entre los logros más destacados se encuentran la construcción de 372 kilómetros de vías rurales, conectando a más de 2mil habitantes con mercados, servicios de salud y educación. Además, se impulsó la comercialización, promoviendo la apertura de nuevos mercados y llevando innovación tecnológica a las fincas con prácticas sostenibles.
Según datos del Programa, se lograron avances significativos en la producción y comercialización de cacao en Tumaco y Putumayo. En Tumaco, se implementaron 125 Unidades Productivas Agropecuarias (UPAs), beneficiando a 253 productores, y se comercializaron 90.708 kilogramos de cacao, generando ingresos de $1.317 millones de pesos.
En Putumayo, se establecieron 334 hectáreas bajo sistemas agroforestales, se certificaron 34 fincas en Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) y se comercializaron más de 26.000 kilogramos de cacao, generando ingresos superiores a $342 millones de pesos. A su vez, en Caquetá la implementación de sistemas ganaderos sostenibles y la participación activa de las mujeres en las UPAs, no sólo impulsaron la productividad, sino que también generaron resultados concretos en la cadena láctea del territorio. Esto resultó en un aumento del 27 % en la producción de leche y la comercialización de 275.355 kilogramos de productos lácteos, lo que se tradujo en ingresos superiores a $1.364 millones de pesos.
El enfoque integral del Programa Rutas PDET en las cadenas de valor de cacao y lácteos fue un pilar clave de su éxito, al combinar innovación tecnológica, mejoras en infraestructura y estrategias de comercialización. Según Gilles Bertrand, Embajador de la Unión Europea en Colombia, “la gran idea de Rutas PDETha sido trabajar de manera integral las cadenas de valor, en particular en la producción de lácteos en Caquetá y de cacao en Putumayo y Tumaco. La clave es que no fue solo un proyecto productivo, sino un enfoque que integró la tecnología, la infraestructura y la comercialización para lograr una sostenibilidad económica que perdure más allá del Programa”.
Este modelo integral permitió establecer un desarrollo económico sostenible en territorios que antes enfrentaban serias limitaciones en infraestructura vial y acceso a mercados, transformando así las oportunidades para las comunidades locales.
Uno de los logros más sobresalientes del Programa fue el liderazgo de las mujeres. Cerca de 220 mujeres participaron activamente en proyectos de infraestructura vial y cadenas productivas, rompiendo estereotipos y consolidándose como agentes de cambio en sus comunidades. Esta participación activa de las mujeres no solo en la construcción de vías, sino también en la gestión de sus fincas y empresas, ha sido clave para el éxito del Programa. Esto permitió aumentar la participación femenina en los procesos productivos en un 61 %, fortaleciendo tanto la economía local como la inclusión social.
Además, la sostenibilidad constituyó un pilar clave del Programa. Bertrand destacó que el cacao de Tumaco se posiciona entre los mejores del mundo y que los quesos producidos en Caquetá han recibido importantes reconocimientos a nivel nacional, lo que refleja el enorme potencial de las regiones para construir una economía fundamentada en su biodiversidad y en productos de alta calidad. Por ejemplo, El programa Rutas PDET impulsó de manera significativa a la cadena cacaotera en Tumaco al promover la participación de los productores locales en eventos clave como el Chocofest y el Salón del Chocolate de Paris. Plataformas que permiten visibilizar el cacao de alta calidad de la región, reconocido por su perfil único y potencial en el mercado internacional.
A través del fortalecimiento de capacidades técnicas, la vinculación con mercados especializados y la promoción de prácticas sostenibles, Rutas PDET posicionó a los cacaocultores de Tumaco como protagonistas del desarrollo económico local, fomentando la asociatividad y generando oportunidades para construir paz en un territorio históricamente afectado por el conflicto.
En la misma línea, Sheila Sanín, coordinadora del Programa Rutas PDET para Conexión ICCO Cooperación, destacó el impacto de la innovación dentro de las cadenas productivas. “En la cadena de cacao, pudimos evidenciar un cambio significativo en la mentalidad de los productores, quienes comenzaron a enfocarse en la calidad y la transformación de su producto. Hemos jugado un papel importante en la infraestructura productiva que ha permitido mejorar el cacao fino de aroma, y trabajamos en aspectos como la marca, el diseño y cómo venderlo. Esto dio lugar a un cambio en la visión de los productores hacia el cacao como un producto de alto valor”, comentó Sanín.
En cuanto a la cadena láctea, subrayó que se logró transformar la producción de queso salado y picado en el Caquetá. “Con 146 productores que han adquirido una nueva visión de su modelo de negocio, nos enfocamos en la mejora de la calidad, la inocuidad y los estándares de leche Esta transformación fue clave para que puedan vender un producto de mejor calidad”, explicó. Además, el Programa contribuyó a que las comunidades productoras abrieran nuevos mercados y establecieran alianzas comerciales que les permitieron expandir sus negocios más allá del departamento de Caquetá, llevando productos como el queso a destinos como Bogotá. Actualmente, ocho empresas se benefician del fondo de inversión y han logrado incrementar su volumen de ventas.
Por otro lado, Alejandra Marín, Coordinadora del Programa Rutas PDET para la Alianza de Bioversity International y el CIAT, señaló que uno de los principales desafíos de la implementación fue la falta de confianza y la incertidumbre de las y los productores al principio del Programa. “Al ingresar al Programa, uno de los retos grandes fue cómo implementar el proyecto, ya que había desconfianza. Fue crucial establecer canales de confianza con las comunidades, para luego poder identificar los retos asociados a las cadenas de valor”, comentó.
Además, destacó que la gestión del conocimiento fue otro desafío importante. “Aunque se valora mucho el conocimiento cultural de las comunidades productoras, el conocimiento técnico aún necesitaba ser fortalecido en ambas cadenas. Los productores tenían una alta disposición al aprendizaje, pero era necesario implementar estrategias de capacitación adecuadas para alcanzar los objetivos establecidos.”
La solución que encontró el Programa para superar estos retos fue la creación de estrategias participativas y el enfoque en la co-creación de soluciones. “La clave fue entender el contexto, conocer cómo funcionan los sistemas de producción y escuchar a las personas. Trabajamos conjuntamente con las comunidades para diseñar estrategias adaptadas a sus necesidades, lo cual resultó fundamental para la implementación exitosa de las innovaciones tecnológicas en las cadenas láctea y cacaotera,” explicó Marín.
John Castañeda, Gerente del Programa Rutas PDET, resaltó que Rutas PDET ha dejado un impacto notable, sobre todo en la consolidación de la cadena láctea en Caquetá. “Uno de los mayores logros del Programa fue la creación y consolidación de una cadena láctea que permitió un encuentro entre productores, comercializadores y todos los actores involucrados. Este encuentro generó cohesión social y ayudó a todos trabajar en la misma dirección, mejorando significativamente los procesos productivos,” explicó.
También resaltó el legado político del Programa, destacando que el modelo de Rutas PDET es considerado replicable y un ejemplo para futuros proyectos integradores. “El modelo de Rutas PDET ha dejado una huella imborrable, tanto en el ámbito político como en el internacional. Este modelo ha sido adoptado por el Gobierno colombiano como una estrategia para futuros proyectos en territorios PDET”, agregó.
El siguiente paso, según el embajador Bertrand, es “escalar estos procesos para que no sean solo proyectos en algunas veredas, sino que se conviertan en empresas que puedan generar desarrollo económico de manera sostenible”. Ahora, el desafío radica en atraer inversiones del sector privado y garantizar el compromiso de los gobiernos locales para replicar este modelo exitoso en otros territorios PDET. “La lección más importante es que la economía sostenible ya existe en estos territorios. Ahora, el desafío es transformar este modelo económico en una economía viable y escalable, trabajando de la mano con el sector privado y los gobiernos locales”.
“Lo que hemos logrado en estos tres departamentos demuestra que las comunidades tienen el potencial para crear una economía sostenible, basada en la biodiversidad y productos de calidad”, concluyó Bertrand, reafirmando el compromiso de la Unión Europea para seguir apoyando el desarrollo de estas regiones a través de la cooperación internacional, mientras se trabaja por consolidar un modelo económico inclusivo y escalable que permita que estas comunidades sigan avanzando hacia un futuro más próspero.
Así cerramos un capítulo de transformación con el Programa Rutas PDET del Fondo Europeo para la Paz. Durante 4 años, trabajamos de la mano con las comunidades rurales. El cierre de este Programa no solo marca el final de un proceso, sino que abre nuevas puertas para seguir impulsando el desarrollo local en estas regiones. Agradecemos a la Unión Europea en Colombia y al Fondo Europeo para la Paz por creer en el potencial de nuestros territorios y apoyar procesos que construyen paz. También extendemos nuestro agradecimiento a la Agencia de Renovación del Territorio (ART) y a nuestros socios Conexión ICCO Cooperación y la Alianza de Bioversity International y el CIAT, quienes hicieron posible este sueño.
Sobre el Fondo Europeo para la Paz
El Fondo Europeo para la Paz es un mecanismo de cooperación integrado por la Unión Europea, 21 de sus Estados Miembros, Reino Unido y Chile, creado para acompañar al gobierno colombiano en la implementación del Acuerdo de Paz, con énfasis en el Punto 1 de Desarrollo Rural Integral y Punto 3 en lo que concierne a la reincorporación de la población excombatiente de las FARC-EP a la vida civil.
En el marco del Fondo se han puesto en marcha 31 proyectos mediante los cuales se pretende contribuir a la reconciliación de la sociedad colombiana, a la reincorporación social y económica de excombatientes, a la equidad de género y la inclusión de sectores vulnerables de la población, al desarrollo rural sostenible e incluyente, y a la presencia legitimadora de Estado y la gobernanza local. La inversión total del Fondo es de 130 millones de euros y su cobertura geográfica abarca 26 departamentos y 181 municipios del país.