232 mil colombianos fueron desplazados y confinados durante el 2023 por grupos armados ilegales

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RCNRadio – El CICR documentó 444 presuntas violaciones del derecho internacional humanitario en Colombia

El Comité Internacional de la Cruz Roja aseguró que pese a los diálogos de paz en Colombia la situación humanitaria es preocupante debido a los ocho conflictos armados identificados que “ afectaron en 2023 a más de 232 mil civiles, víctimas de desaparición, desplazamiento, violencia sexual,  confinamiento, afectación por artefactos explosivos, y reclutamiento de niños y adolescentes por grupos ilegales.

En su balance anual humanitario, presentado por Lorenzo Caraffi, jefe de la delegación del CICR en Colombia, se indica que “al menos 145 mil personas se desplazaron individualmente, lo que supone un aumento del 18 % respecto al año anterior. En Bolívar,  la población afectada aumentó en un 94 %, mientras que, en Cauca y Putumayo, el incremento superó el 50 %.”

En cuanto al desplazamiento masivo, hubo una reducción  en un 13 %., pero  según el reporte “ alrededor de 50 mil personas tuvieron que abandonar su hogar”, en algunos departamentos, el fenómeno se profundizó. “El aumento más significativo se dio en Putumayo, que registró un incremento de más del 1.000 %. También es relevante la situación de Nariño. Allí se presentó el 52 % del total de población desplazada de manera masiva,” recalca el balance del CICR.
 


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El confinamiento de comunidades, también aumentó en un 19 % en todo el país, “como consecuencia del recrudecimiento de las acciones armadas y la presencia de artefactos explosivos en los territorios.”  El informe del CICR precisa que “alrededor de 47 mil personas estuvieron confinadas,” en el Chocó, se concentra el 44 % de la población afectada.

El Comité Internacional de la Cruz Roja registra en su balance,  “380 víctimas directas de artefactos explosivos como minas antipersonal, restos explosivos de guerra, artefactos lanzados y de detonación controlada. La mayoría de ellas civiles”.  205 civiles, entre ellos 23 menores de edad, 154 integrantes de la fuerza pública y 21 de grupos ilegales fueron afectados por las minas.

El informe del CICR  documentó 222 casos de desaparición en el 2023, relacionados con los conflictos armados y la violencia. “Esta cifra no da cuenta del número total de desapariciones que pudieron ocurrir en ese tiempo y que probablemente es bastante mayor,” advierte el balance.

Finalmente, el CICR registra los actos violentos contra la asistencia de salud y acoge los datos de La Mesa Nacional de Misión Médica que reportó 511 eventos, de los cuales el 27 % se relacionó con los conflictos armados. “Entre los casos registrados se encuentra el homicidio de nueve personas, la cifra más alta de los últimos cinco años. De estas personas, cinco eran sanadores tradicionales,” subraya.

Lorenzo Caraffi hizo un llamado al Gobierno y los grupos con los cuales se dialoga, “es fundamental que el Estado colombiano y los grupos armados sitúen las preocupaciones humanitarias en el centro de los diálogos de paz. En medio de las negociaciones se pueden adoptar acuerdos especiales que contribuyan a aliviar el sufrimiento de la población afectada por los conflictos armados, reforzando las obligaciones que tienen las partes en conflicto frente al derecho internacional humanitario,”, puntualizó el jefe de la delegación del CICR.


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El Comité Internacional de la Cruz Roja aseguró que pese a los diálogos de paz en Colombia la situación humanitaria es preocupante debido a los ocho conflictos armados identificados que “ afectaron en 2023 a más de 232 mil civiles, víctimas de desaparición, desplazamiento, violencia sexual,  confinamiento, afectación por artefactos explosivos, y reclutamiento de niños y adolescentes por grupos ilegales.

En su balance anual humanitario, presentado por Lorenzo Caraffi, jefe de la delegación del CICR en Colombia, se indica que “al menos 145 mil personas se desplazaron individualmente, lo que supone un aumento del 18 % respecto al año anterior. En Bolívar,  la población afectada aumentó en un 94 %, mientras que, en Cauca y Putumayo, el incremento superó el 50 %.”

En cuanto al desplazamiento masivo, hubo una reducción  en un 13 %., pero  según el reporte “ alrededor de 50 mil personas tuvieron que abandonar su hogar”, en algunos departamentos, el fenómeno se profundizó. “El aumento más significativo se dio en Putumayo, que registró un incremento de más del 1.000 %. También es relevante la situación de Nariño. Allí se presentó el 52 % del total de población desplazada de manera masiva,” recalca el balance del CICR.

El confinamiento de comunidades, también aumentó en un 19 % en todo el país, “como consecuencia del recrudecimiento de las acciones armadas y la presencia de artefactos explosivos en los territorios.”  El informe del CICR precisa que “alrededor de 47 mil personas estuvieron confinadas,” en el Chocó, se concentra el 44 % de la población afectada.

El Comité Internacional de la Cruz Roja registra en su balance,  “380 víctimas directas de artefactos explosivos como minas antipersonal, restos explosivos de guerra, artefactos lanzados y de detonación controlada. La mayoría de ellas civiles”.  205 civiles, entre ellos 23 menores de edad, 154 integrantes de la fuerza pública y 21 de grupos ilegales fueron afectados por las minas.

El informe del CICR  documentó 222 casos de desaparición en el 2023, relacionados con los conflictos armados y la violencia. “Esta cifra no da cuenta del número total de desapariciones que pudieron ocurrir en ese tiempo y que probablemente es bastante mayor,” advierte el balance.

Finalmente, el CICR registra los actos violentos contra la asistencia de salud y acoge los datos de La Mesa Nacional de Misión Médica que reportó 511 eventos, de los cuales el 27 % se relacionó con los conflictos armados. “Entre los casos registrados se encuentra el homicidio de nueve personas, la cifra más alta de los últimos cinco años. De estas personas, cinco eran sanadores tradicionales,” subraya.

Lorenzo Caraffi hizo un llamado al Gobierno y los grupos con los cuales se negocia, “es fundamental que el Estado colombiano y los grupos armados sitúen las preocupaciones humanitarias en el centro de los diálogos de paz. En medio de las negociaciones se pueden adoptar acuerdos especiales que contribuyan a aliviar el sufrimiento de la población afectada por los conflictos armados, reforzando las obligaciones que tienen las partes en conflicto frente al derecho internacional humanitario,”, puntualizó el jefe de la delegación del CICR.


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