Aproximadamente 3 de cada 10 jóvenes colombianos entre 18 a 29 años se encuentran en el grupo de ninis, expresión que identifica a aquellos jóvenes que ni estudian ni trabajan, según lo revela un informe del Centro UR para asuntos de la OCDE de la Universidad del Rosario.
De acuerdo con el análisis “Transición de la educación al trabajo: ¿Dónde están los jóvenes de hoy?” realizado por el Centro UR para asuntos de la OCDE de la Universidad del Rosario, más del 25 % de la población juvenil mundial se encuentra en esta situación. En el caso de Colombia, el 28,67 % de los jóvenes de 18 a 24 años y el 19,30 % de aquellos entre 25 a 29 años se clasifican como ninis.
Estas cifras no solo superan el promedio de la OCDE, sino que también evidencian las particularidades regionales dentro de Colombia, demandando políticas adaptadas a cada contexto, dijo Alejandro Cheyne, rector de la Universidad del Rosario, quien presentó los resultados del informe.
Una de las principales revelaciones del estudio es la necesidad de distinguir entre ninis desempleados, que activamente buscan trabajo sin éxito, y ninis inactivos, que no buscan empleo ni participan en la educación. Esta diferenciación es crucial para el desarrollo de programas y políticas enfocadas que aborden efectivamente las necesidades de cada subgrupo.
Análisis por regiones
Según el estudio, los departamentos con el índice más alto de ninis entre los 18 a 24 años son Vaupés (58,78 %), Amazonas (57,61 %), Arauca (56,66 %), Vichada (55,93 %), Putumayo (55.40 %), Chocó (54,62 %), Casanare (47,70 %) y Guainía (47,23 %). Señala el análisis que en estas regiones “hay barreras significativas para la participación en actividades productivas o educativas, lo cual podría traer consecuencias duraderas en su potencial económico y bienestar social”.
A los jóvenes de 25 a 29 años en estos departamentos se les dificulta el panorama, debido a que se observan patrones significativos de desempleo e inactividad que tienen profundas implicaciones socioeconómicas, ya que en este momento etario es crucial consolidar la carrera laboral y alcanzar estabilidad económica, comentó el rector.
La participación de ninis en este rango de edad en Arauca (76,87 %), Vichada (58,33 %), Chocó (57,49 %), Putumayo (56,86 %), Vaupés (56,49 %), Guanía (54,94 %), Amazonas (50,91 %) y Guaviare (47,56 %) es particularmente alta. La falta de oportunidades de empleo o una desconexión entre las habilidades de los jóvenes y las necesidades del mercado laboral son los factores que más afectan a estos jóvenes, destaca el informe.
Regiones con menos ninis
En contraste con la situación arriba descrita para los jóvenes de 18 a 24 años, Bogotá (25,53 %), Nariño (26,27 %), Valle del Cauca (27,52 %), Antioquia (27,60 %), Atlántico (29,82 %), Risaralda (29,65 %), Guajira (29,67 %) y Santander (29,94 %) tienen las tasas más bajas de ninis. Aunque estos jóvenes están activamente buscando trabajo, se encuentran en dificultades para integrarse al mercado laboral, indicó Cheyne.
Los jóvenes entre 25 a 29 años de edad en Bogotá (22,87 %), Nariño (22,94 %), Valle del Cauca (24,99 %), Guajira (25,37 %), Antioquia (26,66 %), Boyacá (27,47 %), Risaralda (27,85 %) y Santander (28,82 %), aunque cuentan con las tasas más bajas de ninis, el informe sugiere que esta población “enfrenta desafíos para insertarse en empleos adecuados o retomar sus estudios” que impide crear una mayor estabilidad laboral y financiera.
Según el estudio, Colombia necesita “una evaluación crítica y una respuesta política enfocada” para resolver los retos de la transición de los jóvenes del ámbito educativo al mercado laboral, enfocándose, principalmente, en los ninis.
Características de los ninis
El informe de la Universidad del Rosario define dos tipos de ninis. Los ninis desempleados, que son jóvenes que se encuentran buscando activamente el trabajo, no obstante, no logran encontrarlo por distintos factores, ya sea debido a la competencia laboral, a la falta de experiencia o a las demandas del mercado. Y los ninis inactivos, que no se encuentran ni buscando trabajo, ni participan en la educación.
Gracias al informe “Education at a Glance 2023”, que realizó la OCDE y que busca generar una conversación acerca del potencial desaprovechado de los jóvenes, sobre todo de los ninis, en esta radiografía se pudo evidenciar que los ninis representan el 25 % de la población juvenil a nivel global.
Las cifras expuestas en el informe de la OCDE permitieron crear una tabla que muestra la realidad colombiana en comparación con los países que integran esta organización: europeos, norteamericanos y latinoamericanos, para los rangos de edad analizados en el estudio de la Universidad del Rosario:
La tabla refleja que los jóvenes colombianos se enfrentan a obstáculos mayores en el proceso de inserción laboral y educativa, que podría ser un síntoma de “desajustes estructurales en la economía, desafíos en el sistema de educación y capacitación y por una posible falta de políticas que promuevan la integración de estos jóvenes en el tejido productivo”, explicó el rector de la Universidad del Rosario.
Brechas de género
El estudio afirma que existe la necesidad de crear pollíticas adaptadas a cada contexto regional y que deben ser enfocadas por género. En un departamento como Antioquia la tasa de ninis por sexo en la población de 25 a 29 años es de 24,59 % en hombres en comparación con el 75,41 % en mujeres.
Estas brechas de género en jóvenes entre los 25 y 29 años también se presentan en Atlántico, Bolívar, Boyacá, Caldas, Caquetá, Casanare, Cauca, Cesar, Córdoba, Huila, Guajira, Magdalena, Meta, Nariño, Risaralda y Sucre, en donde el porcentaje de mujeres ninis está entre el 75 % y el 82 %.
El estudio recomienda la implementación de programas educativos que respondan a las demandas específicas del mercado laboral por cada departamento, garantizando la relevancia y la calidad de la formación técnica y profesional, que, asimismo, permitan facilitar la transición de los jóvenes al mercado laboral. Por otro lado, también es fundamental abordar las desigualdades de género desde el desarrollo educativo y profesional.
Todo esto, con el propósito de no solo reducir la cantidad de ninis, sino de mejorar la calidad vida y las oportunidades de los jóvenes colombianos que también contribuyan al desarrollo económico y social del país. Esta información genera una preocupación más grande y junto con los datos de la Gran Encuesta Integrada de Hogares (GEIH) de 2022, realizada por el DANE, se pudo determinar que hay que prestar crucial atención a las regiones.