- Parques Nacionales Cómo Vamos alerta sobre la persistencia de actividades ilegales dentro de los Parques Nacionales Naturales
- En Colombia el 68 % de los Parques Nacionales Naturales continentales están bajo algún tipo de amenaza
Bogotá D.C. 19 de diciembre de 2023. «Es preocupante que la estabilidad ecosistémica y los servicios ofrecidos a Colombia por los Parques Nacionales Naturales estén amenazados porque, tanto en su interior como en las zonas donde se ubican, persisten actividades como la deforestación, los cultivos de uso ilícito y la ganadería», afirmó hoy en Bogotá la iniciativa de la sociedad civil Parques Nacionales Cómo Vamos (PNCV), durante la presentación del Informe 2023 PNCV «Los Parques Nacionales Naturales colombianos: amenazas y oportunidades para su gestión».
El Informe, que en su mayoría analiza periodos comprendidos entre 2020 y 2022, destaca que, a pesar del alto valor que tienen los Parques Nacionales Naturales (PNN), la deforestación, los cultivos ilícitos, la minería ilegal, la ganadería y los incendios, entre otros, están poniendo en riesgo al menos el 68 % de los PNN continentales colombianos, siendo los más críticos Catatumbo Barí, Paramillo y Farallones de Cali.
Según PNCV, aunque en los PNN hay una tendencia a la reducción de la deforestación, ésta sigue siendo una de las principales actividades ilegales que amenazan la diversidad, las contribuciones de la naturaleza a la sociedad y espacios vitales de quienes los habitan, así como las 12.297.712 hectáreas de bosques que protege el Sistema de Parques Nacionales Naturales (SPNN). «Entre 2019 y 2022 se perdieron más de 46.000 hectáreas, casi el equivalente al tamaño del PNN Munchique en Pacífico (46.982 ha)».
El incremento en 2022 de cultivos de uso ilícito al interior de los PNN también preocupa a la iniciativa de la sociedad civil PNCV. Dentro de 14 parques fueron registradas 8.749 hectáreas de cultivos de coca, el 4 % del total nacional. Entre los casos más preocupantes se encuentra el PNN Paramillo, único reportado para el Caribe, donde se detectó el 24 % (2.099 hectáreas) de las áreas cultivadas de coca en el SPNN, y con una tendencia de aumento de hectáreas desde 2019.
Por ello, la iniciativa y sus nueve aliados (la Fundación Santo Domingo, la Fundación Corona, la Fundación Natura, Alisos, WWF Colombia, WCS, Dejusticia, la Pontificia Universidad Javeriana y la Universidad de los Andes), hicieron un llamado urgente al Sistema Nacional de Parques Nacionales Naturales (SPNN) y al Gobierno Nacional a establecer como meta la eliminación total de la deforestación dentro de los PNN en los próximos tres años como plazo máximo.
Aunque los PNN conservan más de 23 millones de hectáreas de diversidad, cerca del 55 % de éstas no ha sido muestreadas o no cuentan con datos abiertos disponibles (SiB Colombia). Debe ser prioridad para Colombia gestionar un mejor sistema de conocimiento sobre los Parques Nacionales Naturales para facilitar la generación de información y la comprensión de la vulnerabilidad, sensibilidad y amenazas a las que se enfrentan, así como a su capacidad de adaptarse o no al cambio climático. El desconocimiento que aún se tiene sobre la biodiversidad en los PNN y los retos que se tiene para gestionar ese conocimiento, es otro de los llamados que hizo iniciativa PNCV.
Según el Informe, de las 6.390 especies endémicas que se conocen en Colombia, es decir que se considera que solo existen en el país, 1.767 se distribuyen en los PNN. Sin embargo, 397 de éstas se encuentran bajo alguna categoría de amenaza. Se destaca que existen 251 especies de aves amenazadas, endémicas y de distribución restringida.
Las dinámicas territoriales de los municipios donde se ubican los PNN también están amenazándolos. Parques Nacionales Cómo Vamos destaca que el aumento de la producción ganadera en las zonas de amortiguación de los PNN puede afectar el funcionamiento de sus ecosistemas y dificultar su conectividad ecológica, en particular en los parques de las territoriales de la Orinoquía y la Amazonía. Por eso, instó al Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) y al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, entre otros actores, a tener un mayor control de esta actividad a través, por ejemplo, del uso de cadenas productivas cero deforestación, lo que implica tener una trazabilidad exacta de la fuente de la ganadería.
En los municipios donde hay PNN se encuentra cerca del 21 % del ganado bovino de Colombia y persiste la tendencia al aumento de animales en 28 áreas donde se ubican Parques Nacionales Naturales. Dos municipios que evidencian esa tendencia son Cartagena del Chairá y La Macarena que, además, presenta frentes de deforestación activos y se encuentran ubicados en sitios estratégicos de conectividad ecológica, en este caso la transición andino-amazónica, que deben gestionarse de una manera diferentes y tener alternativas de uso del suelo, porque su vocación no es ganadera.
Finalmente, Parques Nacionales Cómo Vamos, consciente de que el SPNN es altamente complejo, destacó que, aunque este sigue siendo el proyecto nacional de conservación más exitoso, requiere modernizar su gestión administrativa. Al respecto, el Informe 2023 PNCV destaca que esto, además de implicar una mayor asignación de presupuesto, «requiere innovar en la manera de priorizar los recursos humanos y económicos, de acuerdo con los objetivos de conservación de cada PNN, las amenazas a las que están expuestos y sus vulnerabilidades» y que, en su operación y manejo, especialmente en los lugares más apartados, es crucial la participación directa de las comunidades locales.