Por : Alexander Africano
Por ahora son inciertos los pagos y se afectaría a por lo menos a 2500 jóvenes en Putumayo, unas de las hipótesis podría ser la demora en el cargue de datos por el ITP, así como el cargue con decimale
Son cientos de estudiantes del ITP que han venido presentados retrasos en dos pagos, el primero de ellos que se debió hacer en el segundo semestre de 2022 y otro por concepto de matrícula; esta situación coloca en expectativa la continuidad académica, ya que en su mayoría los estudiantes no cuentan con los recursos para su sostenimiento.
La situación es tan preocupante que varios estudiantes del ITP han solicitado públicamente al Departamento para la Prosperidad Social – DPS y al ITP para que se realice un debate y se establezca que es lo que está sucediendo, quienes son los responsables y cuales son las opciones para garantizar que no se presente una “deserción estudiantil” sin precedentes en el Instituto Tecnológico de Putumayo. Así mismo, han solicitado la intervención de un representante a la cámara por Putumayo y sendas peticiones al DPS nacional.
Tan crítica es la situación, que algunos de los estudiantes entre hombres y mujeres se han visto obligados a empeñar sus pertenencias para solventar sus necesidades de alimentación, transporte, alojamiento y demás propias de la formación académica, donde muchos de ellos y ellas ven con preocupación su continuidad y sus sueños de ser profesionales en las diferentes áreas que oferta la institución.
Consultada una fuente creíble da cuenta de que el DPS tiene un convenio de corresponsabilidad con el ITP donde se maneja una plataforma SIJA (sistema de información jóvenes en acción) la cual se alimenta con el cargue de información por parte del ITP y donde se suben los estudiantes que van a recibir el beneficio; lo que se ha conocido es que tiempo atrás ha habido demoras permanentes en el cargue de los datos por parte del ITP; así mismo existirían evidencias que dan cuenta de que el DPS territorial Putumayo solicitó con antelación se subiera la información sin que se alimentara a tiempo la plataforma. Se espera que el atraso de los pagos no tenga nada que ver con lo enunciado.
Otra gran debilidad suele ser que los estudiantes no consultan los canales de Prosperidad Social y de las Instituciones Educativas, desconociendo así los criterios de inscripción definidos en cada convocatoria y la verificación del cumplimiento de los requisitos de ingreso al Programa. Existe desconocimiento para adelantar la fase de pre-registro de manera autónoma, al igual que la garantía en la veracidad de la información consignada en el formulario de pre-registro sobre las condiciones académicas, demográficas y socioeconómicas actuales y los aspectos de culminación de la fase de pre-registro suministrando los soportes requeridos, en ocasiones no realizan seguimiento a sus procesos de inscripción mediante el Portal de Información del Joven en Acción.
Es menester recalcar que en la actualidad existen dos programas que benefician a los estudiantes de universidades públicas, que son el programa de “matricula cero” que es del ministerio de educación y el programa “jóvenes en acción” que es de Prosperidad Social.
Lo que llama poderosamente la atención es que si no se realizó el cargue de la información en los tiempos establecidos, los estudiantes quedarían sin sus pagos, contrario es que si se cargó en la plataforma a tiempo los recursos se desembolsarían en los próximos días. Quedan varias dudas, entre ellas ¿Se tiene certeza sobre el cargue a tiempo del cargue de la información?, es decir antes de la fecha de corte; ¿los profesionales encargados de jóvenes en acción del ITP, si tienen sentido de pertenencia y empatía con los estudiantes que entre otras son de bajos recursos?, si se cargó la información ¿Cuál es la dificultad de los pagos?, otra gran pregunta es ¿cómo se reporta la información en decimales a la plataforma?, esto si se tiene en cuenta que un decimal afecta un pago cualquiera que sea.
No podemos pasar por alto que desde la salida del anterior director del DPS Putumayo el arquitecto Esteban Davila en el mes de octubre, existe un vacío de dirección en la entidad pues no se ha nombrado su director en propiedad, es decir ya son casi 06 meses sin cabeza visible, la comunidad se pregunta por qué los 03 representantes por Putumayo no se han puesto de acuerdo para gestionar el nombramiento como tal; tal es el desconcierto que algunas personas han manifestado que hay un desinterés por este cargo, desconociendo que los programas del DPS impactan por lo menos a 70.000 Putumayenses, donde se incluye población que se encuentra en el índice de pobreza multidimensional (Colombia mayor, familias en acción, jóvenes en acción, ingreso solidario).
Por ahora lo que exigen los estudiantes y con justa causa es que les hagan efectivos los pagos sin dilaciones de ninguna índole, exigen también que no “se tiren la pelota” entre entidades.