Teniendo en cuenta las demandas identificadas y priorizadas en algunos cultivos en el departamento de Putumayo, la Corporación colombiana de investigación agropecuaria – AGROSAVIA, dando cumplimiento a la ejecución de actividades dentro del proyecto «Diagnóstico Fitosanitario en cultivos de Sacha Inchi, Pimienta, Asaí y Mora en el departamento del Putumayo», financiado por La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito – UNODC y la Gobernación de este departamento, presentó los resultados diagnósticos de las principales limitantes sanitarias encontradas en estos cultivos y se estableció un protocolo de recomendaciones preliminares que estimulen la adopción de prácticas que favorezcan la disminución de la incidencia de las plagas y enfermedades en estos cultivos.
El departamento de Putumayo cuenta con zonas diversas en la producción agrícola, en las cuales se adaptan una gran variedad de especies de plantas cultivables. Sin embargo, el establecimiento de nuevos sistemas productivos en la región implica un riesgo en el incremento de la incidencia de plagas y enfermedades, que repercuten en una disminución de la producción óptima de los cultivos. El desequilibrio ecológico con el establecimiento de monocultivos y el desconocimiento de las incidencias fitosanitarias tiene como resultado pérdidas económicas de los agricultores, afectando la economía del sector rural y urbano del departamento.
En este sentido la Corporación, con el liderazgo del grupo de investigación de la Sede Florencia y el Centro de Investigación Nataima, se entrega un documento a los productores, gremios e instituciones gubernamentales y del sector productivo, que contiene dos capítulos: el primero con información de las enfermedades identificadas durante el periodo de muestreo realizado entre marzo a junio de 2021 y el segundo, información de los insectos identificados dentro del desarrollo de este trabajo. Lo que se busca es que a través del tiempo se logre establecer un Manejo Integrado del Plagas y Enfermedades (MIPE), el cual se fundamenta en estrategias integradas que incluya diferentes herramientas y métodos que permitan la reducción de poblaciones en los cultivos de interés, causando el mínimo de daño posible al medio ambiente, las personas y las plantas de su entorno natural.