Escrutado sin inconvenientes el 99,99% de las mesas de votación, aparecen los grandes ganadores pero también orbitan alrededor varios derrotados comenzando por el Gobierno que le transfirió toda su impopularidad al candidato oficialista sacándolo de la escena. Análisis.
RICARDO AREIZA – unidadinvestigativa@lanacion.com.co
Faltando solamente diez mesas por escrutar las elecciones presidenciales del domingo pasado claramente reflejaron dos inéditos ganadores: Gustavo Petro, el más votado y Rodolfo Hernández, la gran sorpresa.
En cambio los resultados del preconteo pusieron al descubierto otro extenso reguero de grandes perdedores.
Federico Gutiérrez, el candidato del oficialismo y de toda la maquinaria político-partidista, fue sin duda, el gran sacrificado. Y sus incondicionales promotores, sus sepultureros.
A su alrededor orbitan otros derrotados comenzando por el Gobierno Nacional que le trasmitió su alta impopularidad, frustrando en seco su carrera.
El más votado
El candidato progresista del Pacto Histórico se impuso en Bogotá, en las costas Caribe y Pacífico, Risaralda, Quindío en el eje cafetero y en el sur del país.
Petro alcanzó las votaciones más altas en la otra Colombia. En Chocó (72,4 %), Putumayo (70,95%), Nariño (70,1%), Cauca (68,8 %) y Vaupés (67,5 %).
Aunque Petro logró la primera votación en Bogotá, perdió puntos (47 %). También ganó en departamentos como el Valle del Cauca (53,5 %), Córdoba (51,91%), Guajira (54,71%), Bolívar (49 %), Magdalena (49 %), Amazonas (46 %), César (44 %), Quindío (31,07%) y Risaralda (35,42%). Incluso en Antioquia, obtuvo la segunda votación después de ‘Fico’.
Sin embargo, esos resultados no le aseguran su victoria en segunda vuelta.
La gran sorpresa
Rodolfo Hernández alcanzó el clímax electoral en el centro oriente del país. Sin embargo, su popularidad traspasó las fronteras comuneras de Galán y de Alcantuz y se propagó como pólvora por todo el país.
Santander, su tierra natal, se convirtió en el principal bastión con el 67 % de los votos. Su vecino, Norte de Santander también apoyó. En Casanare (64,1 %), Arauca (58 %) y Norte de Santander (54 %). En Vichada, que no conocía obtuvo 39,57%. Caquetá que nunca visitó obtuvo 46,13%, en el Huila 44,67% y en Tolima 39,34%. Sin duda, el candidato de la Liga Anticorrupción fue el otro sorpresivo ganador. Su discurso repentista logró calar. Sin grandes manifestaciones, sin costosas vallas atrapó el voto antipolítico, antisistema, antiduque, antiuribista pero también el voto antipetrista. Esa es su principal fortaleza.
Voto paisa
En Antioquia no hubo sorpresas. ‘Fico’, el gran sacrificado, ganó solamente en Antioquia con el 48,80% en el principal bastión del uribismo.
Aunque venció a Petro, la participación paisa no fue tan arrasadora como pudo pensarse. El 51,2% de los antioqueños escogieron otras opciones, entre ellas la de Petro (24,03%); Rodolfo (18,36%) y Fajardo 5,44%.
En Medellín con alcalde progresista ‘Fico’ obtuvo el 53,57%. Petro solo el 24,47%.
Grandes perdedores
Con ‘Fico’ fuera del escenario, también llevarán la corona de espinas, las grandes maquinarias y las empresas electorales que oxigenaron los partidos tradicionales comenzando por el conservador, el partido de la U, Cambio Radical y por supuesto, el jefe del Partido Liberal César Gaviria que se sumó sin éxito a la campaña.
En el exterior
‘Fico’ ganó en Estados Unidos con el 45,03 % Petro sumó el 31,59 % y Rodolfo Hernández el13, 8%.
Petro triunfó en Alemania (59, 40 %), Austria (58 %), Bélgica (55,42 %), Dinamarca (56,98 %), Francia (57,67 %), España (47,59 %) entre otros.
Petro ganó en Argentina (63,62 %), Brasil (52,71 %), Chile (49,36 %) y Uruguay (50,47 %). En contraste ‘Fico’ ganó en Venezuela (44%), Ecuador (42 %), Perú (43,29 %), Bolivia (41 %) y Paraguay (51,35 %).
Rodolfo Hernández solamente ganó en Emiratos Árabes Unidos con el 40,50%.
Cara y sello
Rodrigo Lara Sánchez, quien llegó en paracaídas al uribismo, perdió con cara y sello. Para comenzar perdió el capital electoral que le permitió llegar a la Alcaldía de Neiva (74.212 votos, el 49,30%). Además, perdió la militancia en la Alianza Verde a la que renunció intempestivamente, sin explicaciones, para aterrizar en la campaña de ‘Fico’.
En tercer lugar, Lara Sánchez se quedó sin la Vicepresidencia pero además sin la curul de consolación en la Cámara de Representantes en caso de haber perdido en segunda vuelta.
Sin embargo, en este caso, como dice Maturana, perder fue ganar un poco. Lara Sánchez ganó figuración nacional que no tenía y que con seguridad, utilizará para una eventual candidatura a la Gobernación. ¿Tendrá suficiente clorofila?
Uribismo en declive
El Centro Democrático, reafirmó el domingo pasado el duro retroceso que ha venido registrando antes de la pandemia.
En marzo pasado el partido de la derecha radical colombiana perdió 10 congresistas (cinco cupos en el Senado y cinco en la Cámara). El ex representante huilense Álvaro Hernán Prada, quien estaba en el renglón 20 quedó por fuera de la representación. Además, perdió el actual cupo que tiene en la Cámara de Representantes.
Ahora, su alfil se derrumbó en forma estruendosa a pesar del apoyo de todas las maquinarias y la vieja casta política tradicional. En el Huila quedó borrado del mapa político. En todos los 37 municipios la dupleta derechista Fico-Lara quedó tercera.
En el Huila se impuso ruidosamente el ingeniero tremendista Rodolfo Hernández con 223.473 votos (44,67%) obtenidos en 28 municipios, sin haber hecho campaña. Petro solo ganó en Neiva, Altamira, Íquira y Villavieja.
Desgaste duquista
El Gobierno Nacional, en pleno declive, también salino derrotado. El desgaste y la impopularidad de Iván Duque (73% según la última encuesta) atizaron la quemazón.
La pobre gestión, las promesas incumplidas y la excluyente sobradez del ejecutivo aumentaron el descontento social, incluso en su propio partido. Ese desprestigio terminó contaminando al candidato oficialista. ‘Fico’ no logró sacudirse de esa generalizada antipatía.
Redes sociales
La fenomenal irrupción de las redes sociales marcó un factor determinante en la jornada comicial. Los medios digitales alternativos también impactaron y movieron las campañas. Los dos finalistas Petro y Rodolfo, sin duda, los más beneficiados y los únicos que dominaron en todas las plataformas digitales.
En contraste, los medios de comunicación tradicionales, comprometidos sin escrúpulos y sin reservas con el candidato del establecimiento, también fueron los grandes perdedores.
La campaña altisonante, parcializada e intencionada de los medios tradicionales en favor de ‘Fico’ le restó credibilidad, acrecentaron la manipulación informativa, fomentaron la polarización del país y radicalizaron a los extremos.
En cambio, invisibilizaron a los demás aspirantes presidenciales, comenzando por Fajardo a quien sacaron del escenario a punta de sondeos. Y al resto, los
Los medios tradicionales en todos los formatos, llamados a ser los guardianes de la institucionalidad, terminaron doblegados ante el oficialismo. Como ocurrió durante las protestas sociales fueron desplazados por las redes sociales que lograron captar las aspiraciones de los seguidores independientes. Una lección no aprendida.
Las encuestas
Las firmas encuestadoras coincidieron en el inusitado crecimiento que venía registrando Rodolfo Hernández y todas pronosticaron que habría segunda vuelta.
Según Invamer Petro mantendría el 40,6 %; ‘Fico’ obtendría el 27,1 % y Hernández el 20,9 % con tendencia a crecer.
El sondeo del CNC contratado por Semana reveló que Petro seguía liderando con el 35,8 %. ‘Fico’ tendría 20,8 % y Hernández llegaría a 19,1 %.
En una eventual segunda vuelta entre Gustavo Petro y Rodolfo Hernández, habría un empate. Ambos marcan 40,5% en la intención de voto.
Este golpe de opinión movió, sin duda, todas las campañas y seguramente, incidió en la intención de voto.
El analista Luis Ángel Gómez Duque, magíster en administración, anticipó con mucha precisión el 27 de mayo lo que sucedería. El tuitero realizó un modelo estadístico sobre las encuestas y un análisis de tendencias anticipando que Rodolfo Hernández pasaría a segunda vuelta.
Petro, según Gómez Duque, obtendría más de 8 millones de votos (39 % del electorado) y Hernández 5.8 millones de votos (28.5 %).
El domingo pasado, los resultados electorales según el preconteo confirmaron la fotografía.
La votación también le ganó espacios a la abstención. La votación total alcanzó el 54,91% lo que significa que la abstención fue del 45,09%. Disminuyeron los votos nulos y los votos en blanco.
La Registraduría Nacional, en el ojo del huracán por las anomalías en las elecciones de marzo, cumplió a pesar de las dudas que generaba. La información fue rápida y se consolidó antes de la hora señalada. Todos dormimos tranquilos por lo menos hasta el cierre. Hoy comenzarán los escrutinios.