WRadio – En diálogo con La W, Wilmar Madroñero, defensor de derechos humanos, señaló que la población está en medio del enfrentamiento de los grupos criminales.
En La W con Julio Sánchez Cristo, el coordinador de la Red de Derechos Humanos del Campesinado del Putumayo, Wilmar Madroñero, se refirió a la difícil situación humanitaria que está afrontando ese departamento por cuenta de masacres, amenazas y hasta desplazamientos.
De acuerdo con Madroñero, la confrontación territorial entre los grupos delincuenciales Frente Carolina Ramírez de las disidencias de la Farc y el Comando de la Frontera, han sumido a la población en una situación de temor y en el medio de la violencia.
«Este es uno de los grandes generadores de violencia que no sólo azota el municipio de Puerto Leguízamo, sino que azota en su mayoría ocho municipios del bajo Putumayo y tenemos esa dificultad, el nivel de asesinatos ha subido, estamos por encima de las cifras del año anterior, confinamientos etc.», señaló en La W.
Particularmente sobre la actuación de la Fuerza Pública y en especial de la Policía, Madroñero calificó su trabajo como «pañitos de agua tibia» porque no se han producido soluciones estructurales a la crisis de violencia.
«Las estadísticas son claras, aquí no ha habido acciones contundentes, aquí se han puesto es pañitos de agua tibia y realmente no ha llegado a solucionar esa problemática de fondo, desde el sector urbano se está dinamizando la inseguridad rural», indicó.
Asimismo, Madroñero expresó que el estado debe atender su responsabilidad y fortalecer la implementación del Acuerdo de Paz. Según el defensor de derechos humanos, no se están dando soluciones de reactivación legal a los campesinos y los cultivos de coca están creciendo.
W Radio se contactó con la Policía del departamento del Putumayo, pero hasta el momento no se ha obtenido una respuesta por parte de la institución.