Denuncia Pública
Como comandante de la Sexta División, denuncio los actos de violencia de los que fueron víctimas soldados del Ejército Nacional, en las veredas Campiña del municipio del Valle del Guamuez, Jordán Ortiz y la Esperanza de San Miguel Putumayo.
Como soldados de la patria, en cumplimiento de las operaciones de control territorial y en desarrollo del plan de erradicación, operaciones que son enmarcadas en el plan de gobierno del presidente, amparadas en el artículo 217 de la constitución política, soldados del Ejército Nacional fueron víctimas de atropellos, humillaciones, agresiones físicas, verbales en medio de una protesta cuando la comunidad los atacó violentamente mientras realizaban estas labores de erradicación manual simultáneamente en tres veredas del bajo Putumayo.
La tropa reaccionó de manera pacífica intentando alejarse del lugar para evitar la confrontación, pero este conglomerado de aproximadamente 1000 personas que se agruparon y constituyeron una protesta social que no solo impidió el cumplimiento de las funciones constitucionales y legales de los miembros del Ejército Nacional, sino que también atentaron contra cada uno de los soldados de la patria que integran la unidad.
Los soldados fueron vulnerados en sus derechos fundamentales consagrados en nuestra Constitución Nacional y los Derechos Humanos contemplados en la Declaración Universal de Derechos Humanos que hacen parte del bloque de constitucionalidad de nuestro ordenamiento jurídico, por cuanto fueron agredidos física, verbal y psicológicamente por la población que impidió el cumplimiento de su deber funcional, así como también fueron víctimas de hurto de sus víveres, y no menor aún, fueron obligados a abordar vehículos civiles y desterrados desde el área de operaciones hasta el parque principal de la Dorada, Municipio San miguel del Departamento del Putumayo.
Por lo cual, se denuncia públicamente a Alias Araña, el Gordo Mauricio, Bonito, el Tuerto, alias Cirugía, Picotaso y Alias el Chavo, autores intelectuales e incitadores de esta protesta violenta y a cada una de las personas que han sido obligadas por estos narcotraficantes para atentar contra la integridad física en su condición de servidores públicos y seres humanos a nuestros soldados.
Estas agresiones, pondrán en conocimiento de las autoridades competentes en aras de que se adopten las acciones que en derecho correspondan por la presunta comisión de conductas punibles sancionadas por nuestro ordenamiento jurídico, reiterando nuestro rechazo a estas actuaciones de quienes obstruyen el cumplimiento de la misión constitucional asignada al Ejército Nacional; sin embargo, continuaremos adelantando operaciones militares, con el fin de debilitar el brazo armado de los Grupos Armados Organizados Residuales y los factores de inestabilidad, para así preservar el orden público en la zona garantizando la seguridad y el bienestar de la población civil del departamento.