Historia para Leguizameños/as – 30

Publimayo

Por : John Elvis Vera Suarez

1930-1934

Agosto 7.

“El Presidente Olaya Herrera comienza su administración…, y en apariencia, nada hacía presumir que las relaciones con el Perú pudieran entrar en un periodo agudo de crisis. Las mayores preocupaciones para el gobierno de “Concentración Nacional” eran de índole económica y fiscal.”[i] “Impulsó la navegación en los ríos del sur. …igualmente confirió a la mujer el derecho de manejar libremente sus bienes.”[ii]


Publimayo


1930

Agosto 16.

“El canje de territorios se realizó finalmente… y los militares colombianos se instalaron de inmediato, al mando del mismo Coronel Acevedo que dirigió la misión colonizadora, dando comienzo a la construcción de la vía Leticia – La Victoria y otra que  conectara los dos asentamientos ya mencionados, La Tagua – Caucaya, esta última de importancia estratégica capital porque permitiría vincular a Florencia, Neiva y Bogotá con la nueva frontera, una conexión perpendicular al Putumayo, en vez de la vía tradicional Pasto – Puerto Asís, que era paralela al río, como en efecto se demostró durante la guerra.”[iii]

1930


Publimayo

“Si en 1900 el caucho amazónico representaba un 60% del total mundial, para 1914 ya sólo era el 27% y en 1930 no llegaba al 2%. Al contrario, el proveniente del Asia, que en 1900 no llegaba al 2%, ya en 1914 era el 60% y en 1930 sobrepasaba el 97% del caucho producido en el mundo (Barrer, 1938:5). En realidad la producción total del caucho amazónico solo decayó en términos absolutos notables a partir de 1920, pero en términos relativos pasó a ser totalmente marginal al ser comparada con el volumen asiático, que en 1930 produjo 821.914 toneladas, mientras la Amazonia sólo produjo14.260 toneladas en el mismo año (Barker, 1938:5).”[iv]

1930

“De acuerdo con el geógrafo F. J. Vergara y Velasco, el país exportó 120.000 toneladas de tagua entre 1845-1846 (lo cual contradice un poco las consideraciones de Acosta Solís). Para el año 1890 llegó a exportar 6.300 toneladas de marfil vegetal. (Vergara, Vol. I, 1901:745).

Sin embargo, la Amazonia solo se benefició de ésta “bonanza” exportadora en la década de 1930, cuando las carreteras al Oriente permitieron sacar este producto tan pesado en forma económica. Especialmente el Putumayo pudo convertirse en exportador indirecto de tagua a través de Tumaco, el principal puerto tagüero del país.  Durante la Segunda Guerra Mundial esas exportaciones llegaron a varios centenares de  toneladas (Vila, 1945:254), para luego decaer, en la década de los cincuenta, con la sustitución de la Tagua por las ebonitas y los plásticos.”[v]

1931

CAQUETA: DECRETO COMISARIAL 16 DE 1930.   LEY 2 de 1931.  

Se vuelve a dividir la Región entre la Comisaría Especial del Putumayo y la Intendencia Nacional del Amazonas (Puerto Caucaya y La Tagua quedan en el Amazonas).[vi]

Se fijaron los siguientes límites:

“Desde la Colonia del CAUCAYA situada en la margen izquierda del río Putumayo por éste aguas abajo, hasta la desembocadura del río Putumayo. Se sigue la línea que trazó la comisión mixta de marcadora de límites entre Colombia y Perú, hasta la desembocadura del río Atacuarí en el río amazonas. Por el río Amazonas aguas abajo hasta encontrar el límite con el Brasil y se sigue luego por todo este límite hasta llegar a la desembocadura del río Apaporis, en el río Caquetá; se toma el río Apaporis aguas arriba hasta encontrar los cerros del Araracuara, se sigue en dirección al Suroeste hasta encontrar el gran raudal Araracuara formado por el río Caquetá, de aquí por este río aguas (arriba), hasta la desembocadura de la quebrada La Tagua en la margen derecha del río Caquetá y de aquí sigue el camino que se construye entre la Tagua y Caucaya has la colonia del mismo nombre.” [vii]

1931

Hasta mediados de este año “el contingente de fuerza en la frontera con el Perú estaba repartido así: un oficial y doce soldados en Puerto Ospina, un oficial y veinte soldados en Caucaya, un oficial y doce soldados en La  Tagua, dos oficiales, sin tropa, en Leticia, protegidos  por diez policías.

Por la situación Peruana y la  actitud ambivalente de su nuevo presidente ante el tratado Salomón Lozano, el gobierno Colombiano reforzó la guarnición de Leticia hacia mediados de 1931, con 35 hombres más que fueron parte del grupo de cincuenta, comandados por dos oficiales que el Gobierno envió para Puerto Asís – Caucaya, reforzados con dos ametralladoras y de los que se quedaron quince, con un oficial, en El Encanto.

A pesar de todos los esfuerzos de cultivar la tierra que desmontaban y procurarse una buena alimentación, eso no es posible. En la tropa reinaban la mala alimentación, la fatiga y las lesiones en la piel por las picaduras de insectos.

Después de una corta estancia en Bogotá regresó a Caucaya el coronel Acevedo en compañía del médico Dr. Eugenio Salas, después de recibir un refuerzo de veintisiete soldados y una ametralladora en Florencia de manos del Teniente Pinzón que los traía comandados desde Neiva, después de reponerse en Bogotá.

A la guarnición de Leticia, en febrero de 1932 y por recomendaciones del Comisario del Territorio del Amazonas, Alfredo Villamil, por ser un “incentivo poderoso para un triunfo fácil”, se resolvió desplazarla a El Encanto.

El gobierno Colombiano en esa política de colonización hacia el Amazonas se preocupó a través del Ministerio de Industrias y el Despacho de Higiene y Trabajo de ubicar en la zona personal sanitario, del Ministerio de Industria, en el Putumayo, “nombrado recientemente, médico jefe de Colonización, al doctor Uldarico Téllez, quien por razones de su cargo tendrá como lugar de residencia a Caucaya, sobre el río Putumayo, centro este de una vasta zona de acción. Estoy seguro que el doctor Téllez prestará en este importante sector un valioso concurso a favor de la asistencia pública, y como en El Encanto, sobre el río Caraparaná, en donde funciona hoy el Comando de la compañía colonizadora  del Amazonas, también hay un eficiente servicio médico a cargo del doctor Rodríguez Bermúdez, distinguido clínico, nombrado hace poco tiempo” y del Despacho de Higiene y Trabajo, en el Caquetá “el actual gobierno que con tanto desvelo estimula la colonización de aquellas regiones, acaba de crear, por intermedio del Departamento Nacional de Higiene, un grupo sanitario para  el bajo Caquetá, cuyo centro de operaciones será La Pedrera. Próximamente se pondrá en camino el médico nombrado para este servicio y muy en breve hará sentir su benéfica influencia en aquella región”.

A fines de diciembre de 1931, en forma previsiva, el gobierno colombiano envió al río Putumayo dos cañoneros, el Santa Marta y el Cartagena. Comandados, el Santa Marta, por el Teniente de Artillería Armando Mora Angueira y el Cartagena por el Teniente de Artillería Luis A. Baquero, y siguió organizando colonias militares en Puerto Ospina, Caucaya, La Tagua y El Encanto además de enviar desde Bogotá vía Girardot, Neiva, Florencia, La Tagua y Caucaya un grupo de hombres.”[viii]

1931       

Julio 3 (viernes).

Se traslada la capital del Corregimiento de  Curiplaya (Arena de Oro), a la confluencia del Orteguaza y el Caquetá,  exponiendo las razones de clima malsano  y  las peores condiciones geográficas, impidiendo esto el desarrollo deseado.  Dicho traslado fue recomendado por el Doctor Cesar Uribe Piedrahita (autor de la novela TOÁ), como jefe de una comisión científica que recorría el Caquetá.[ix]

1931

Decreto 1978

El vapor Nariño y la Lancha Huila, fueron destinados por medio de este Decreto a la navegación Comercial de los ríos Putumayo, Caquetá y Amazonas, dependiente del Ministerio de Industria.[x]

1931

Julio.

Mientras en el Perú la oposición al Tratado aumentaba, nuestro gobierno tomó algunas medidas para salvaguardar la seguridad de Leticia, que empezaba a dar los primeros pasos para su desarrollo. A mediados de este año, la guarnición fue reforzada con 35 hombres adicionales; esta era una cifra más bien simbólica ya que el Perú disponía en la Amazonia de una fuerza con creces más poderosa.[xi]

El General Oscar R. Benavides, después elevado a Mariscal y Presidente de la República del Perú, en la última parte del Conflicto de Leticia, exponía quejándose a su vez: “Leticia fue elevada a la categoría de Capital de Intendencia del Amazonas. Casas  de madera compradas en EE.UU. de Norte América fueron armadas etc. En julio de 1931, casi un año después de la entrega, llegó a bordo del “Nariño” procedente de Caucayá, (río Putumayo), una guarnición colombiana de cuarenta y cinco hombres al mando del teniente Virgilio Barco.”[xii]

1932

Enero 8.

El “Ministro Plenipotenciario de Colombia en Lima, Fabio Lozano y Lozano, había dado una voz de alerta que no fue atendida. Entre la Cancillería colombiana y el Ministro Lozano y Lozano se cruzaron los siguientes cablegramas:

“Bogotá, enero de 1932.

Lecolombia. Lima.

En esta ciudad circulan noticias de que presidente Sánchez Cerro desconoció o va a desconocer Tratado. Sírvase indagar informándonos sobre si esa especie, que naturalmente creemos infundada, pueda tener origen en ese país.                                                                                        

                                                                                                  Exteriores.”

El Ministro Plenipotenciario Lozano y Lozano, contestó:

“Lima, enero 9 de 1932.

Exteriores. Bogotá.

Es infundida la noticia a que su cable se refiere, pero refleja el deseo íntimo de mucha gente. Por eso es necesario estar prevenidos, mostrar cierta arrogancia; si nos creyeran débiles se atreverían.

                                                                                                  Lecolombia.”[xiii]    

1932

En febrero, la guarnición colombiana de Leticia fue retirada hacia El Encanto ya que carecía de suficiente capacidad defensiva; con razón el comisario del Amazonas, Alfredo Villamil, la describía como «un incentivo poderoso para un triunfo fácil,» algo que podía llevar a la repetición de lo ocurrido en La Pedrera dos decenios atrás.[xiv]


[i]              Vázquez Cobo, Alfredo. PRO PATRIA. La Expedición Militar Al Amazonas en el Conflicto de Leticia. Banco de la República. Bogotá. 1985. Pág. 23        

[ii]                            BARRIOS, LUIS  A. HISTORIA DE COLOMBIA. Ediciones Cultura. Bogotá – Colombia. Quinta Edición. 1984. Pág. 156

[iii]                           Restrepo, Juan Camilo; Betancur, Luis Ignacio. ECONOMIA Y CONFLICTO COLOMBO – PERUANO. Villegas Editores. Diciembre de 2001. Bogotá. Pág. 72

[iv]                           Domínguez, Camilo; Gómez, Augusto. LA ECONOMIA EXTRACTIVA EN LA AMAZONIA COLOMBIANA 1.850-1.930. TROPENBOS. COA. Bogotá. Pág. 119

[v]                            Domínguez, Camilo; Gómez, Augusto. LA ECONOMIA EXTRACTIVA EN LA AMAZONIA COLOMBIANA 1.850-1.930. TROPENBOS. COA. Bogotá. Pág. 256

[vi]                           Varios Autores. ATLAS CULTURAL DE LA AMAZONIA COLOMBIANA.   LA CONSTRUCCIÓN DEL TERRITORIO EN EL SIGLO XX.   Ministerio de Cultura;  Instituto Colombiano de Antropología;  Corpes Orinoquía;  Corpes Amazonía.  Mapa # 48.

[vii]                           PEÑA CONTRERAS, LIGIA; HOYOS OCAMPO, LUCY.     ESTUDIO DESCRIPTIVO DE LA COMISARIA ESPECIAL DEL AMAZONAS URBANA Y  RURAL. Leticia 1982

[viii]                          GOMEZ LOPEZ, AUGUSTO J. HISTORIA GENERAL DEL DEPARTAMENTO DEL PUTUMAYO – Texto de guía para la enseñanza – II. Ministerio de Cultura. Bogotá, D.C. Mayo 2001. Pág. 442

[ix]                           ARTUNDAGUA  BERMEO,  FELIX.   HISTORIA  GENERAL DEL CAQUETA.  Fondo Mixto para la Promoción de la Cultura y las Artes del Caquetá.  Cuarta edición.  1999.  Pág.  134

[x]APRILLE-GNISET, JACQUES. LA CIUDAD COLOMBIANA. SIGLO XIX Y SIGLO XX. Banco Popular. Fondo Promoción de Cultura. Instituto Colombiano de Cultura. Santafé de Bogotá. 19992. Pág. 284.

[xi]                           PINEDA CAMACHO, ROBERTO.  EL CICLO DEL CAUCHO.  Biblioteca V8irtual del Banco de la Republica.

[xii]                           VAZQUEZ COBO, ALFREDO. PRO PATRIA. LA  EXPEDICIÓN MILITAR AL AMAZONAS EN EL CONFLICTO DE LETICIA. Banco de la Republica. 1985. Santafe de Bogotá. Pág. 274

[xiii]                          Vázquez Cobo, Alfredo. PRO PATRIA. La Expedición Militar Al Amazonas en el Conflicto de Leticia. Banco de la República. Bogotá. 1985. Pág. 23               

[xiv]                          PINEDA CAMACHO, ROBERTO.  EL CICLO DEL CAUCHO.  Biblioteca V8irtual del Banco de la Republica.


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