Las amenazas las recibió a través de una llamada telefónica por parte de un desconocido
Puerto Asís/Colprensa
En la mañana de ayer de un teléfono móvil la diputada y miembro de Marcha Patriótica, recibió la llamada donde un hombre con voz amenazante le decía: “diputada deje la joda con sus denuncias de derechos humanos, no olvide que conocemos todo de usted”. Al preguntar por la identidad de la persona que hablaba le respondieron: “si no se calla y hace lo que le digo nos va a conocer”.
Yuri Quintero es fundadora de la Red de Derechos Humanos del Putumayo, desde donde ha denunciado ante entidades y autoridades competentes casos y situaciones que se vienen presentando en las comunidades y con los dirigentes de manera directa por parte de los actores armados que por año siguen operando en el Putumayo, incluyendo la fuerza armada.
Desde su curul en la Asamblea Departamental y como miembro de la Mesa Regional Campesina e Indígena y como integrante de la junta patriótica Putumayo, ha dado la batalla para que los derechos humanos en este departamento al sur de Colombia no sean violentados por los agentes armados delincuenciales y narcotráfico.
En los últimos días la diputada Quintero, en declaraciones de prensa regional y nacional venia manifestando su preocupación por la manera que grupos armados ilegales posibles disidentes de las Farc junto con bandas delincuenciales de segundo nivel se viene disputando el territorio sobre orillas de los ríos Putumayo y san Miguel para el control del narcotráfico.
Igualmente denuncio algunas operaciones militares adelantadas por tropas de la Brigada 27 de Selva en el área rural del municipio de Puerto Asís, generando temor entre los moradores del corredor Puerto vega-Teteye, quienes volvieron a sentir el ruido de las balas como en el pasado, como lo refirió la diputada en una reciente entrevista radial.
La amenaza fue puesta de conocimiento ante el Gobierno Nacional y demás autoridades competentes en espera de una respuesta en protección para la señora Quintero.
“Esta situación no me llena de miedo sino, de ira”, acoto la diputada quien argumenta que la situación la obliga a adoptar medidas de autoprotección y de cambiar su agenda de trabajo que desempeña en la zona rural del bajo Putumayo.
Sobre sospechas de donde puede provenir la amenaza no tiene idea, pero lo que sí sabe es que desde hace meses atrás viene notando la presencia sospechosa de personas en los lugares que ella frecuenta.
Desde meses atrás ella viene solicitando una medida de seguridad especial sin que hasta la fecha se le haya otorgado a pesar que la comisión internacional de derechos humanos CIDH, la declaro beneficiaria de medidas cautelares que no han sido implementadas por el Gobierno Nacional.-