El Macizo Colobiano, ese nudo en donde nacen las cordilleras Central y Oriental, es un lugar clave para la seguridad hídrica de Colombia. En sus picos nacen los ríos Magdalena, Cauca, Putumayo, Caquetá y Patía. Por si fuera poco, en él confluyen los biomas Andino, Amazónico y Pacífico, lo que lo convierte un punto clave para la biodiversidad colombiana.
Por eso el anuncio del presidente Juan Manuel Santos de que ya están listos los lineamientos para el desarrollo regional sostenible del Macizo Colombiano, es tan importante. Según dijo el mandatario desde Mercaderes (Cauca), estas órdenes quedaron consignadas en el documento Conpes 3915.
Un documento Conpes es, en pocas palabras, un marco legal que guía todas las acciones que deben hacerse para cumplir los objetivos. En ese sentido. El Conpes del Macizo Colombiano es clave para decirle a gobiernos locales, entidades regionales y actores del sector privado qué deben hacer para conservar esta importante ecorregión del sur del país.
Y es que el tamaño del macizo obliga a que 89 municipios de siete departamentos (Huila, Cauca, Nariño, Tolima, Caquetá, Putumayo y Valle del Cauca) se pongan de acuerdo en su gestión. Eso, sin contar con las seis Corporaciones Autónomas Regionales y de Desarrollo Sostenible que deben velar por su protección con acciones coordinadas.
“En el Macizo se genera el 70 por ciento del agua que consumimos los colombianos y es necesario garantizar el suministro de dicho recurso y la conservación de los ecosistemas estratégicos de la ecorregión”, advirtió Luis Fernando Mejía, director del Departamento Nacional de Planeación(DNP), en el evento.
El Macizo es además el hogar de osos andinos, pumas, robles, encenillos y frailejones. Su importancia es tal que en 1978 la Unesco lo declaró reserva de la Biósfera global. no es para menos: tiene 779.000 hectáreas de páramos, el 13,4% de los páramos del planeta.
¿Qué dice el Conpes?
De acuerdo con la presidencia, el Conpes contempla tres tipos de acciones que deben llevarse a cabo para conservar el Macizo Colombiano.
La primera tiene que ver con la protección, recuperación y manejo de los ecosistemas y zonas de importancia estratégica del Macizo colombiano. “Con esta estrategia se busca llegar a 1,1 millón de hectáreas de áreas protegidas; alcanzar la meta de deforestación neta cero; e incluir 6 proyectos de pago por servicios ambientales en todas las zonas hidrográficas del Macizo”, señaló la presidencia en un comunicado.
La segunda, tiene que ver con la consolidación de sistemas productivos que reconozcan las características ambientales y sociales de la ecorregión. Para esto el gobierno planea implementar siete planes de desarrollo agropecuario integral, definir 25 corredores turísticos en los municipios de la región y dejar formulados cuatro programas de desarrollo con enfoque territorial.
Por último, el Conpes plantea que se debe conformar una estrategia de los gobiernos locales, regionales y el central para “actualizar en un 100% los instrumentos de planificación y ordenamiento (POMCA, POD, POT y Catastro), la construcción del Modelo de Desarrollo y Ordenamiento Prospectivo del Macizo y la definición de su estructura ecológica principal”.
Tomado de Twitter de Luis Fernando Mejía, director general del Departamento de Planeación Nacional (DNP).
Fuente : ElEspectador