(AGENCIA DE NOTICIAS RPTV). El incremento de la temperatura a niveles de los que no se tiene registro histórico lleva a que los colombianos pasen las duras y las maduras por cuenta de este fenómeno que parece raro. Aunque los expertos tienen sus teorías, entre ellas, que lo relacionan con el cambio climático, con la cercanía del territorio colombiano a la línea del Ecuador o con los fuertes vientos en capaz altas de la atmósfera.
uno de los que se acoge a estos dos últimos conceptos es el astrofísico de la Universidad Nacional de Colombia, Santiago Vargas Domínguez. “Colombia está muy cerca del Ecuador, entonces, estamos recibiendo el sol directamente y eso hace que el efecto sea mayor; así que estos meses febrero y marzo son en los que más vamos a sentir esa picazón porque está penetrando más energía del sol a la tierra”.
Además, señala que hay vientos muy fuertes en capas altas de la atmósfera y esos vientos hacen que la nubosidad sea barrida, al pasar esto las nubes no puede evitar que penetren los rayos del sol con más intensidad.
Y frente a este panorama surge la palabra experta del Centro Dermatológico Hospital Universitario Federico Lleras Acosta en cabeza de su directora, Claudia Marcela Rojas Daza, quien dice que “estos rayos ultravioleta pueden penetrar y pueden ocasionar daños muy graves en la piel que van desde quemaduras y desde hiperpigmentaciones hasta cánceres”.
Como solución, Rojas Daza recomienda que se debe, entre otras medidas, utilizar un protector solar que tenga amplio espectro, que sea para radiación ultravioleta que cubra o tenga protección contra esos rayos. “Es importante que sea un protector, en lo posible, con un factor de protección solar mayor de 50”, dice Rojas Daza.
La directora de la importante Entidad no duda en hacer otras recomendaciones teniendo en cuenta, por ejemplo, a las personas que carecen de mayor poder adquisitivo para acceder a esta gama de productos:
• Protección física en brazos y piernas.
• Ponerse sombrero de ala ancha (7 centímetros de diámetro)
• Utilizar gafas oscuras
• Portar sombrilla
• Auscultar la piel y verificar utilizando un espejo para detectar si hay lesiones en la piel o lunares que hayan cambiado de tamaño.
• Acudir al dermatólogo en caso de alguna alerta.
• Entre 9 y 4 de la tarde protegerse, si es necesario, buscando la sombra. Por ejemplo, debajo de un árbol.
El principal factor de riesgo para desarrollar un cáncer de piel son los llamados rayos ultravioleta procedentes de la luz solar, que producen mutaciones en el ADN de las células que se acumulan durante años.