“Uno es dueño de lo que calla y esclavo de lo que dice”, reza el refrán popular. Se debe tener cuidado de lo que se publica en las redes sociales: Facebook y Twitter. Pues cada uno de los trinos y publicaciones en estas páginas hablan de nuestras calidades personales.
El recién nombrado gerente de la Empresa de Energía de Bogotá (EEB), Fernando Gómez, se ha visto en graves aprietos por no medir sus palabras. Resulta que en su cuenta de Twitter usó algunos términos de grueso calibre que no le lucen a una persona que ocupa semejante cargo.
Apenas se posesionará este viernes 8 de febrero, y ya la acción de la EEB ha perdido casi un 3% en su precio. Y todo por los trinos desafortunados del señor Gómez. Esto para que nos hagamos una idea de las graves consecuencias de no medir nuestras palabras.
Cuando los periodistas le preguntan por qué lo hizo, él argumenta que sólo tenía a 20 amigos que lo seguían y por eso se dio la licencia de hablar con ellos “en confianza”. Grave error. Un profesional como él, y cualquiera de nosotros, los parroquianos de a pie, no sabemos qué nos depara el futuro, ni los cargos que llegaremos a ocupar. Así que es mejor cuidar la imagen.
Y es que ahora quienes hacen los procesos de selección en las empresas usan el Facebook como una fuente de información para conocer la personalidad de sus candidatos.
Una investigación realizada por la agencia española de relaciones públicas Túatú encontró que 91% de las personas encargadas de los procesos de selección usan las redes sociales para conocer más sobre su candidato.
Esta investigación también devela que el 69% de ellos ha rechazado a un candidato por el contenido encontrado en redes sociales. Una de las principales razones es que cuando entraron a ver sus perfiles encontraron que sus candidatos mintieron sobre sus cualificaciones, también por comentarios y fotos inapropiadas.
Pero ojo, si usted es inteligente en el manejo de su imagen a través de estas redes, eso le puede traer sus réditos. Ese mismo estudio señala que el 68% de los reclutadores ha contratado a alguien por el contenido publicado, donde el 39% lo hizo porque su perfil les transmitía una sensación positiva de su personalidad.
Como dicen el argot popular, si no tiene nada bueno que decir, más bien quédese callado. En las redes sociales, al contrario de lo que pasa en el contacto personal, todo queda escrito y no hay forma de que lo desmienta. Algunas de las recomendaciones que hacen los expertos en protocolo web, son:
· No publique fotos bebiendo licor.
· No haga comentarios insultantes.
· Muestre siempre su lado amable.
· No es necesario que haga publicaciones diarias y sin importancia como: “estoy comiendo”, “me voy a dormir”, “tengo hambre”.
· Si bien el Facebook es para expresarse libremente, piense que lo están leyendo cientos de personas. Así que mejor cuénteles algo interesante.
· Cuando tome fotos con sus amigos, no los etiquete sin su permiso. Primero consúltelos, es probable que a ellos no les interese hacer públicas sus rumbas.
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Ricardo Solarte Ojeda
Director Creativo Antorcha, Cifras y Comunicación SAS
Periodista especializado en Economía y Negocios
Con especialización en Gerencia de Mercadeo Universidad EAN